La vulneración de derechos de niños, niñas y adolescentes pertenecientes a los centros del Servicio Nacional de Menores no es algo que, a esta altura, sorprenda a nadie en nuestro país.
Luego de la muerte de la pequeña Lissete Villa en el CREAD de Playa Ancha, vino un período de fuerte exposición pública respecto de lo que sucedía al interior de dichos centros, lo que motivó comisiones investigadoras en la Cámara de Diputados, diversos reportajes e incluso una investigación judicial a cargo del fiscal Marcos Emilfork.
Todo esto llevó a que el tema de la infancia fuera uno de los eslóganes principales de la campaña del ahora Presidente Sebastián Piñera, quien, en innumerables ocasiones, ha reiterado su frase de “los niños primeros en la fila”.
Sin embargo, según diversos expertos, este lema contrasta con algunas de las medidas impulsadas por su administración, las cuales han sido fuertemente cuestionadas por entidades como la Defensoría de la Niñez.
Tal es el caso de iniciativas el control preventivo de identidad a menores de 18 años, la ley Aula Segura, además de propuestas de algunos alcaldes como el horario límite para menores de edad.
Sobre este tema, en conversación con Radio Universidad de Chile, la directora Ejecutiva de la Asociación Chilena Pro Naciones Unidas (ACHNU), Francis Valverde, criticó la falta de consistencia por parte de las autoridades en esta materia.
“Hay un eslógan que dice los niños primero y hay una práctica que dice a los niños hay que criminalizarlos. Todas las propuestas que se han hecho en relación a Aula Segura, a el control de identidad a los 14 años, el toque de queda, establecen una noción: los niños son peligrosos”.
En ese sentido la ex candidata a la Defensoría de la Niñez recalcó que “es el Estado el que tiene el deber de protección con los niños y niñas y no al revés ya que los niños consigo mismos no son garantes de sus propios derechos. Son los adultos y el Estado en especial quien debe generar esas condiciones”.
Y agregó que “cuando queremos controlar la vida de los niños y niñas a través de estos distintos dispositivos que se están generando a través de las comunas, por ejemplo, estamos entrando en un estado policial hacia la vida de niños y niñas. Además, la criminalización de la infancia y de la juventud, especialmente popular, es altamente preocupante”.
Junto con poner en duda la efectividad de medidas de este tipo, la experta cuestionó la legalidad del denominado “toque de queda juvenil” que, según aseguró el alcalde de Las Condes, Joaquín Lavín, será sólo una “recomendación”.
“Se dice que vamos a recomendar, ¿quién va a recomendar? ¿Por qué motivo un adulto cualquiera va a acercarse a un niño? Cuando nosotros les hemos enseñado a los niños que no hablen con desconocidos justamente para protegerlos. Pero además se pasa a llevar un principio legal muy relevante en nuestro país y es que sólo Carabineros y la PDI pueden pedir el carnet de identidad” enfatizó.
Por esta razón, para Francis Valverde, existe una “criminalización de la infancia” cuyas causas apuntan principalmente a la falta de una legislación que proteja a este sector de la población.
“Aquí hay un motivo basal que permite que la criminalizacióin ocurra y es que en Chile no hay una ley de protección integral de derechos de niñas y niños. Somos el único país en América Latina y el Caribe que no tiene una ley que proteja estos derechos a más de treinta años de firmada la Convención por los Derechos de los Niños”.
Desde su perspectiva, “la criminalización y el Estado policial hacia el cual estamos caminando con mucha fuerza, tiene que ver con una ideología en la cual la libertad es menos relevante que la seguridad y la seguridad es entendida desde la perspectiva del control social por parte de las autoridades y la policía”.
Finalmente la especialista recalcó que “cuando un estado no es garante de los derechos de las personas – y el Estado de Chile no lo es por Constitución- estructuralmente tiene una noción de ver a su ciudadanía como peligrosa y cuando un estado ve a su ciudadanía como peligrosa, entonces actúa en consonancia”.