La reunión de la Comisión de Trabajo de este lunes fue muy concurrida. A los trece diputados que la conforman, se sumaron los representantes del gobierno, liderados por el Ministro de la cartera, Nicolás Monckeberg y una gran cantidad de asesores y prensa.
El clima que rodeó a la reunión no fue el más calmo. Una sesión tensa que finalizó con la abrupta salida de los diputados oficialistas, obligando a la suspensión de la discusión del proyecto de reducción de la jornada laboral para la mañana de este martes, cuando finalmente fue despachado para su discusión en sala.
En conversación con Diario y Radio Universidad de Chile, la presidenta de la Comisión de Trabajo, diputada Gael Yeomans señaló que el de la tarde del lunes fue un espectáculo vergonzoso por parte del oficialismo.
“Me pareció vergonzoso ver la actitud de los diputados del oficialismo mostrando cualquier artimaña. El papel con el mensaje de “Más Lento” que luego se hizo público deja en evidencia la acción coordinada y acordada, me atrevo a decirlo, en La Moneda porque el día lunes se juntaron previamente para poder organizar el escenario de esta comisión. Por lo tanto esto viene organizado desde el Gobierno para poder dilatar y no entrar al fondo del proyecto de ley, se buscó excusas con procedimientos de forma, con reglamentos, tratando de dilatar lo más posible”.
Tanto el Gobierno como los gremios empresariales han expuesto una serie de argumentos públicamente e incluso se ha calificado esta actitud como una arremetida comunicacional. Al respecto la diputada Yeomans señala que ello demuestra la campaña del terror que han tanto el Ejecutivo como el empresariado.
“Lo que intentan es decir que con la reducción de jornada laboral se va a ver afectado prácticamente todo, vienen las 7 plagas y se va a destruir Chile porque reduciremos la jornada laboral y eso es un argumento tan burdo que llega a dar risa. Por ejemplo, en materia del fútbol, ellos no se ven afectados por la jornada ordinaria de trabajo, pues tienen jornadas especiales.
Me da un poco de vergüenza que el ministro del Trabajo tenga ese argumento, cuando el propio Código del Trabajo establece explícitamente la diferencia entre jornada ordinaria y jornada especial y este proyecto versa sobre la jornada ordinaria, por lo tanto no afecta ni al mundo del fútbol ni a a otros gremios que se ven aludidos para decir que la reducción los afectará”.
Consultada respecto del anuncio del oficialismo de acudir al TC para reclamar la constitucionalidad de la moción parlamentaria, la diputada de Convergencia Social manifestó que se trata nuevamente de una forma de retrasar la discusión.
“No quieren que el proyecto salga a la luz, que sea una ley vigente. Con esta maniobra dilatoria que intentarán no solamente en la Comisión, sino en la Sala y luego en el Senado simplemente creo que dan un espectáculo vergonzoso y están quedando en evidencia frente a la ciudadanía. Lo que hay detrás de las maniobras dilatorias es que no quieren decir directamente a la ciudadanía que no quieren rebajar la jornada laboral, que no están de acuerdo con el contenido del proyecto. Así de simple”.
La parlamentaria hace énfasis en señalar que el Gobierno ya no tiene margen para discutir. “El Ejecutivo, de todas formas, se quedó sin argumentos. El Ministro fue tan burdo en su presentación que reiteraba una y otra vez los mismos argumentos, no tenía argumentos nuevos”.
Gael Yeomans también hace hincapié en las contradicciones que ha caído el gobierno de Chile Vamos respecto de las posibles consecuencias que acarrearía la reducción de la jornada laboral de 45 a 40 horas.
“En primer lugar el Presidente señaló que iba a aumentar el desempleo: 250 mil puestos menos. Luego, con el informe de la Dipres, que no fue presentado ayer en la Comisión, sin embargo lo mandan a El Mercurio y a través de ellos nos enteramos que con la reducción de la jornada se afecta al gasto presupuestario debido al aumento de empleos. No han sido capaces de decidir entre un argumento y otro. Es absolutamente inconsistente”.
“Si nos ven de otros países, como al Gobierno le preocupa tanto, este espectáculo ha sido vergonzoso”, agregó la presidenta de la Comisión de Trabajo.
Consultada respecto de la unión de la oposición para apoyar el Gobierno, la diputada del Frente Amplio expresó que ha habido un trabajo importante. “Llegamos a un acuerdo en materia de gradualidad que no solamente es con los diputados, sino la bancada completa de la DC, incluso los senadores. Eso le da proyección a que el proyecto de ley pueda salir despachado. El fin de semana la senadora Rincón también señaló el respaldo que tiene el proyecto por parte de su partido. En este punto hemos encontrado un acuerdo y ello tiene que ver con que estamos poniendo en el centro el bienestar de los trabajadores y trabajadoras y creo que mientras la política la configuremos de esa manera, claro que podemos avanzar y eso es lo relevante del acuerdo al que hemos llegado de manera transversal. Son las y los trabajadores los que han llamado a terreno a sus diputados. en los distritos nos han dicho que es necesario reducir la jornada laboral, por los niveles de estrés que tienen, el no poder ver a las familias, los problemas sociales que están detrás de esto: hijos que no pueden compartir con sus padres por las intensas jornadas laborales tiene también complicaciones sociales y hacernos cargo de eso es por el interés de la ciudadanía”.
En cuanto a las reacciones del empresariado, tanto de los sectores de la agricultura, del comercio y del transporte y su rechazo a la normativa propuesta argumentando el perjuicio de sus funciones y, principalmente, los salarios de los trabajadores, la parlamentaria manifestó que ello es una demostración de que no les interesa el bienestar de sus trabajadores.
“Sea en época de bonanza, de crecimiento económico, cuando se llenaron los bolsillos de grandes utilidades, ¿por qué no pensaron en los trabajadores, en reducir su jornada laboral, en aumentar sus salarios? Cuando acá hay épocas de bonanza ganan ellos, y cuando tenemos problemas económicos pierden los trabajadores, nunca los empresarios. Eso demuestra el nivel de desigualdad que tenemos en Chile y el necesario debate que requerimos para poner en relevancia el avanzar en mejores condiciones de vida para nuestros ciudadanos y creo que eso es lo hace este proyecto de ley, pero obviamente hay muchas materias más que tenemos que resolver y eso no quiere decir que no estemos preocupados del crecimiento económico porque obviamente lo estamos, pero entendiendo que este país ha decidido ser exportador, que mantiene una matriz exportadora de producción y ahí demuestra sus limitaciones. Necesitamos avanzar en un modelo de desarrollo distinto y obviamente estamos disponibles para discutirlo y llegar a un plan común. Tenemos que dar una discusión más de fondo, pero este proyecto de ley nos ha permitido entrar a este debate y eso es muy relevante para el futuro del país”.
Respecto de las urgencias para la discusión del proyecto, Gael Yeomans, señaló que efectivamente es el Ejecutivo el que, con sus sumas urgencias, marca la agenda debido al régimen presidencialista, sin embargo, explicó que ello no puede impedir el avanzar en las mociones de los parlamentarios.
“Esta moción en particular llevaba dos años en el Congreso, sin avances. Hay otras que llevan 10 años, estamos hablando de cero avance de las mociones. Hay que pensar cómo hacemos avanzar en términos reglamentarios las mociones, pero existen posibilidades de poner el proyecto en tabla y eso lo veremos en las reuniones de comité. También el Presidente de la Cámara jugará un rol y por ello dialogaremos con él para que este proyecto sea puesto en tabla pronto”.
El proyecto de rebaja de la jornada laboral ordinaria de 40 horas ahora debe ser discutido en la Sala de la Cámara de Diputados, sin embargo, en la mañana de este martes, el presidente Piñera aseguró que utilizará todos los instrumentos que tenga a su disponibilidad para que se respete la Constitución ya que considera que las diputadas autoras de la moción se atribuyeron facultades que la Constitución no respalda al tratarse de una materia de iniciativa exclusiva del Primer Mandatario.