Durante las últimas semanas se han acentuado las dudas y cuestionamientos respecto de las atribuciones que tendrán los nuevos gobernadores regionales que a partir del próximo año serán electos democráticamente como ocurre en la mayoría de los países del mundo.
Sin embargo, desde el debate parlamentario de la ley de traspaso de competencias durante el gobierno de la ex presidenta Michelle Bachelet hasta la mesa técnica conformada por la actual administración, no se ha observado voluntad política ni tampoco celeridad para avanzar en esa línea.
Tanto es así que la bancada trasversal de diputados y senadores regionalistas, ante la inacción del Ejecutivo, optaron por ingresar dos mociones para modificar la Constitución y la Contraloría General de la República, con el objeto de que sea esta última entidad la que resuelva la contienda de competencias.
Esto, ante un escenario en el que el gobernador regional podrá, eventualmente tener menos atribuciones en algunas materias que el delegado presidencial, lo que podría generar pugnas y disputas de poder en los gobiernos locales.
Para el Director del Centro de Estudios Regionales de la Universidad Austral, Egon Montecinos, “efectivamente las atribuciones para ambas autoridades no son limitadas, pero tampoco son suficientes. Son un primer paso, los avances que puedan experimentarse en materia de transferencia de competencias desde el delegado presidencial a las autoridades electas, van a depender de múltiples factores, entre otros, el desempeño que tengan los gobernadores regionales en el ejercicio del cargo”.
En ese sentido, el también ex intendente de Los Ríos enfatizó que “tampoco es la solución para promover la descentralización transferirle competencias de una manera tan radical y no gradual a las nuevas autoridades regionales porque esto puede provocar problemas, especialmente en el control de la gestión y en el buen uso de los recursos”.
Por esta razón el académico fue categórico en que “no por andar más rápido se va a andar mejor a nivel regional” y advirtió que, probablemente, el liderazgo de los propios gobernadores en el ejercicio de su cargo podría ser un motor para las nuevas transferencias de competencias.
“Hay regiones que por su naturaleza y su composición van a ser regiones que van permitir a un gobernador regional moverse con importancia estratégica como las regiones Metropolitana, Biobío y Valparaíso por ejemplo, entonces yo siempre pongo entre comillas esta calificación de limitadas atribuciones y competencias que va a tener el gobernador regional”.
Otro de los aspectos que recalcó el especialista es que a partir de las próximas elecciones se generarán, paulatinamente, múltiples ganancias para las regiones, entre ellas una nueva forma de relacionarse con los territorios.
“Hoy en regiones el promedio de duración de intendentes es de un año y medio. Por lo tanto, la conducción política del desarrollo de una región, la posibilidad de tener proyectos de desarrollo del mediano plazo que se consoliden, que crezcan , que hagan cambiar las regiones hoy día está ausente. No hay conducción política en las regiones por más que se quiera decir que los intendentes son los representantes del Presidente de la República en la región”.
Quien también se ha manifestado optimista respecto de la nueva figura de gobernador regional es el ex presidente de la comisión asesora presidencial sobre descentralización, Esteban Valenzuela, quien ha reiterado la importancia que tiene este hecho, más allá de los perfeccionamientos que se le puedan hacer a la ley. Asimismo, el también ex diputado, descartó una escasez de atribuciones para quienes resulten electos en octubre del próximo año.
“Se está eligiendo en un mismo cargo al gobernador regional, al presidente del consejo regional y al jefe del área metropolitana. Es el gobierno regional en este caso el que se hace cargo de este tema porque se buscó algo pragmático en la descentralización que logramos pactar y vienen un montón de competencias” enfatizó.
Los próximos días serán decisivos para definir el futuro de algunas autoridades que tendrán que dejar sus cargos para ser candidatos a gobernadores regionales.
En la región Metropolitana, una de las opciones más fuertes es la de la actual intendenta Karla Rubilar, quien este fin de semana se reuniría con el Presidente Sebastián Piñera para evaluar su postulación a dicho cargo. Desde la UDI en tanto, la figura que concitaba más apoyo era la de la alcaldesa Evelyn Matthei, quien descartó abandonar el sillón edilicio de Providencia.
En la otra vereda aún no hay claridad respecto de las opciones que baraja la oposición. Una de las alternativas, el ex ministro Francisco Vidal, desestimó esta idea, argumentando la escasez de poder que tendrían los futuros gobernadores regionales.
Cabe recordar que el plazo legal para que las autoridades en ejercicio dejen sus cargos es el próximo 25 de octubre.