A ratos, medio niño y juguetón. En ocasiones, llevado a sus ideas, pero solidario y cariñoso. Para algunos, un ser de otra dimensión. Para otros, un hombre muy “nerudiano” para su tiempo. El quijote que le abrió al “pueblo” las puertas del Museo Nacional de Bellas Artes y que a fines de los años 80 se instaló en la televisión a hablar de arte como si nada.
Recordar al artista Nemesio Antúnez (1918-1993) es un ejercicio interminable. En esa tarea confluyen todo tipo de emociones y vivencias. Así lo demuestra el libro Cuando conocí a Nemesio… Biografía oral sobre la vida de Nemesio Antúnez que será lanzado por Taller 99 Ediciones el próximo sábado 14 de diciembre.
El libro, de la investigadora Ximena Vial Lecaros, reúne 25 testimonios que dan cuenta de distintas etapas biográficas del artista que, desde los años 50, marcó a toda una generación de creadores, difundiendo la técnica del grabado y revalorando el arte popular.
De esta forma, el texto comprende relatos de Manuela Antúnez, Pablo Antúnez, Eduardo Vilches, Roser Bru, Patricia Velasco, Ricardo Lagos Escobar, Juan Pablo Langlois, Guillermina Antúnez, Mauricio Redolés y Bororo, entre otros.
Los testimonios son decidores y variados. Así, mientras unos ahondan en la dimensión del padre, el esposo y el amigo, en otros se aborda su rol como agregado cultural, su dirección en el Bellas Artes, su autoexilio durante dictadura, así como su papel en la campaña del “No”.
“Fue un constante trabajo dedeconstruir todo aquello que yo creía que sabía y volver a construir una imagen desde la intimidad, desde las personas que lo conocieron. Creo que este fue un trabajo de asumir la humanidad de un personaje público, porque la historia, en general, se centra mucho en la institucionalidad de los personajes y olvido es un enemigo muy potente que borra todo aquello que no se oficializa”, dice Ximena Vial, autora de la publicación.
“Si tuviera que resumirlo, diría que Nemesio fue un gran comunicador: él comunicó a través de su imagen artística, especialmente, porque no sobre intelectualiza las cosas, por lo tanto, su imagen fue fuerte, clara y para todo público. Creo que eso es lo que mejor lo definiría”, señala la investigadora.
Los otros Nemesios
A lo largo de las páginas del libro, son variadas las anécdotas que se pueden encontrar sobre el artista. Una de ellas involucra a su hijo Pablo, quien recuerda varias salidas junto a su padre, entre ellas, una escapada en motocicleta por Providencia y un ir y venir por reuniones y fiestas en Estados Unidos.
“Mi papá era divertido, pero nunca se involucró mucho en las cosas prácticas de la vida de un hijo, como ir a la reunión de padres del colegio o por las notas. No sé si esto debe haber sido algo de los padres de la época, pero él le delegaba eso a mi mamá. La labor creativa de mi papá lo consumía un montón, entonces no era él quien se ocupaba del supermercado ni de las cuentas”, rememora en el texto Pablo Antúnez.
Mientras, en otro pasaje, Mauricio Redolés señala: “Nemesio era único porque no hacía esa diferencia de clase, diferencia que hacemos la mayoría de los chilenos. Uno siempre está que estos son cuicos, que estos son proletas, que estos son medio pelo, que estos son cuma y que estos otros son flaites. Para Nemesio la gente era gente y punto”.
Para Ximena Vial las palabras de Redolés son esclarecedoras, porque hacen referencia a los problemas políticos del país. “De alguna manera, Redolés nos muestra cómo Nemesio lograba recomponer los tejidos sociales en sus vínculos, porque era una persona muy transversal. Entonces, me parece una entrevista que tiene mucho valor en términos históricos”, sostiene.
Así, respecto de la entrevista con Ricardo Lagos, donde se da a conocer el rol de Antúnez en la campaña del “No”, la investigadora afirma: “Ricardo Lagos es capaz de hablar de Nemesio como una continuidad de la democracia, es decir, Nemesio renuncia al Bellas Artes luego del golpe de Estado y retoma su cargo de rector con la vuelta a la democracia. Eso también es importante desde la historia del arte”.
El libro también deja abierta la pregunta sobre dónde ubicar políticamente a Antúnez. Según ello, Ximena Vial explica que Nemesio fue parte de un grupo de personas que hizo de la “no militancia” su forma de ser. “A todos les cuesta catalogarlo políticamente, pero lo interesante es que a pesar de ello, todos hablan de que él tenía convicciones y posicionamientos bastante claros respecto de varios temas, el arte, la cultura, incluso temas éticos del día a día”, dice.
“Su no militancia era parte de su posicionamiento político, porque lo mantenía libre y él era un personaje que le gustaba transitar por distintos tejidos sociales”, agrega la investigadora, quien además ve en la figura de Antúnez valores relevantes frente a la crisis que vive el país.
“Todos los análisis dicen que estamos en un sistema que deterioró el tejido social, un mundo tremendamente individualista y eso nos ha precarizado en términos económicos, pero también en términos sociales. Pero, Nemesio y su trabajo eran justamente lo contrario. Desde el Taller 99 y desde “Ojo con el arte” hacia un trabajo colectivo. Eso es un gran legado y creo que puede ser la llave de lo que estamos viviendo, que es recuperar la comunidad”.
El libro
El libro será presentado el próximo sábado 14 de diciembre a las 12 horas en el Taller 99 (Zañartu 1016, Providencia). El texto será comentado por Rafael Munita, miembro de la directiva del Taller 99, y su autora Ximena Vial Lecaros.