Este miércoles el proyecto que permite el retiro del 10% de los ahorros previsionales será votado en la Sala del Senado con un resultado que se prevé favorable para los defensores de dicha iniciativa. Con ello, el Ejecutivo tendrá -por tercera semana consecutiva- una importante derrota, considerando que cada día son más los senadores de su sector que adelantan su voto a favor.

Sin embargo, esta no es la única medida que se debate en el Congreso y que tiene por objetivo mitigar los efectos de la crisis económica a causa de la pandemia. Es así como el presidente de la comisión de Constitución de la Cámara, el DC Matías Walker, anunció hace algunos días que pondría en tabla la moción de diputados del Partido Comunista en conjunto con  otros legisladores de oposición, la que busca crear un impuesto de emergencia del 2,5% para los más ricos del país para enfrentar los efectos del COVID 19.

Al respecto, la jefa de la bancada del Partido Comunista, Camila Vallejo, valoró la decisión de poner en tabla el proyecto, pues, desde su perspectiva se trata de una medida urgente y necesaria para enfrentar la difícil situación económica que atraviesan millones de familias en todo Chile.

“Este jueves comenzará discusión de Impuesto a los Súper Ricos. ¿El Gobierno que dice defender la progresividad, seguirá oponiéndose a cobrar un impuesto patrimonial a los súper multimillonarios de Chile para ir en ayuda de nuestro pueblo?”, interpeló la parlamentaria.

Por su parte, la diputada Karol Cariola indicó que “la modificación que se hace a la Constitución es un artículo transitorio, y por ende, una vez aplicado este impuesto deja de tener efectos. Es una medida concreta de coyuntura para poder ayudar a financiar las necesidades de las personas que no le han llegado los beneficios del Gobierno”.

En relación a la implementación de la medida el diputado Daniel Núñez (PC) adelantó que “la aplicación de este nuevo impuesto, como es obvio debe ser realizado por el SII y para ello recurrir a las facultades que la Ley Tributaria le entrega a dicho servicio, en particular las normas que contempla la cláusula anti-alusión”.

La moción parlamentaria establece un impuesto transitorio, equivalente al 2,5% del patrimonio de las personas más ricas del país, que detenten un patrimonio igual o superior a los 22 millones de dólares. De acuerdo a la propuesta, el establecimiento de este impuesto, podría allegar recursos al fisco equivalentes a US$ 6.500 millones.