Hace ya bastante tiempo que el Servicio Nacional de Menores (Sename) y los organismos colaboradores son criticados y cuestionados por su ineficacia, su modelo de negocio y su trato para con las niñas, niños y adolescentes.
Numerosas denuncias y artículos periodísticos han destapado una realidad de abusos que, incluso, han motivado proyectos legislativos para acabar definitivamente con el Sename.
Uno de los textos más recientes sobre la realidad de esta institución es el libro Abandonados. Vida y muerte al interior del Sename, de la periodista Carolina Rojas. Pero este texto tiene algo peculiar: son las niñas, niños y adolescentes víctimas del sistema los que adquieren voz, los que cuentan su realidad.
En entrevista con nuestro programa Semáforo, la autora sostuvo que no fue fácil ganarse la confianza de sus entrevistados, pues la historia de cada uno de ellos ha derivado en la desconfianza hacia la figura del adulto.
“Lo más difícil fue llegar a sus historias, el reporteo, en escribirlo me demoré bastante menos, y tiene que ver con ganar la confianza de los entrevistados, porque ellos han desarrollado la desconfianza como un músculo, sobre todo con las niñas, niños y adolescentes, porque tenemos que situarnos en que la mayoría de los adultos que han estado en contacto en sus vidas, en sus ciclos vitales, se han transformado también en sus agresores”.
Carolina Rojas se refirió también a la importancia de conocer las historias desde el posicionamiento de sus protagonistas, más allá del ámbito técnico o académico, sino que testimonial.
“Era importante darle voz a las víctimas, que es algo que nunca pasa en este país, que tiene que ver con el silencio, con las cosas que se ocultan. Por eso me parece importante, en esta retórica de reparación, llevar el nombre de cada niño en cada capítulo, ¿quién es? ¿cuáles son sus vidas? ¿cuáles son los sueños que tuvieron y los que tienen? Porque ellos no son víctimas, ellos dicen que son sobrevivientes”.
Para la periodista, es precisamente el Sename una fotografía de lo que es la sociedad chilena, pues evidencia la desigualdad que hay entre ricos y pobres.
“El Sename es el retrato de la desigualdad que existe en cualquier ámbito del país, y esto podemos verlo con la pandemia del Covid-19, quiénes son las personas que mueren en este país. Entonces me parece súper importante destacar la correlación que existe entre pobreza e institucionalización. Todos sabemos que en el barrio alto existen padres negligentes, existen, por cierto, muchos maltratos y abusos sexuales, pero quienes están institucionalizados son los niños pobres de este país, y es importante dejar en claro esa correlación”.
Abandonados. Vida y muerte al interior del Sename, es una investigación periodista contenida en 230 páginas. Bajo el sello de Ediciones B, el texto puede ser adquirido mediante plataformas digitales producto del actual contexto de pandemia.