La semana recién pasada, la Unión Demócrata Independiente (UDI ) publicó, por medio de sus redes sociales, un contenido que, en plena campaña por el rechazo de una nueva Constitución, recogía una frase contenida en una de las canciones emblemáticas de Víctor Jara: “El derecho de vivir en paz”.
La mención de inmediato desencadenó diversas críticas en la que participaron parlamentarios y actores culturales. Así, por ejemplo, el presidente del Partido Socialista, el senador Álvaro Elizalde, señaló: “Utilizan el nombre de una canción de una víctima de la dictadura para defender la Constitución que fue impuesta por la fuerza”.
Desde la Fundación Víctor Jara también se refirieron a este hecho, recordando el sentido “legítimo y real de la frase”: “Víctor Jara compuso esta canción como una forma de protesta contra la guerra de Vietnam (…). Se trató de una guerra tan injusta como desigual, en la que un pequeño pueblo debió defenderse de una agresión brutal”.
“El mundo conoció la ignominia de ver a niños y niñas quemadas por las bombas de napalm de los aviones norteamericanos. Víctor Jara reaccionó contra ese horror sin límites, clamando por la paz”, indicaron por medio de una declaración pública.
En esa línea, Cristián Galaz, director ejecutivo de la entidad, indicó que no solicitarán una rectificación y que, frente a este caso, es la ciudadanía la que debe juzgar las decisiones del partido gremialista: “No decimos que la UDI tiene que responder, sino que quien quiera utilizar este mensaje debe someterse al escrutinio del pueblo para tener o no, finalmente, legitimidad de usar la frase. Ahí es donde el juicio del pueblo siempre es certero”.
“Hay que decir, muy claramente, cuál fue la motivación que Víctor Jara tuvo al escribir esa canción. Esto tiene que ver con el rechazo de la protesta en contra de la guerra de Vietnam. Eso es lo primordial, entonces, es un clamor por la paz que después se transformó en un himno mundial. Finalmente, acá es tomado como un himno para protestar en contra de la represión del Estado. Es una canción que tiene ese sentido”, sostuvo.
¿Solicitarán alguna rectificación?
Ellos tienen que actuar consecuentemente con lo que dicen ser, pero no esperamos nada frente a esta especie de apropiación cultural indebida que además, lamentablemente, no está penada por la ley, pero sí está penada por el actuar moral y ético que todo ser humano debe seguir.
Estallido social y conmemoración
Crisitán Galaz también recordó cómo la figura de Víctor Jara fue puesta en valor en el marco del movimiento social que inició en octubre del año pasado. Al respecto, señaló que la obra del compositor siempre ha estado vinculada a las reivindicaciones de la ciudadanía.
“Víctor Jara nunca se ha ido. Siempre ha estado en el corazón del pueblo y esto no es una cosa solamente en Chile, sino que ocurre en muchas partes del mundo. Víctor Jara no es patrimonio de la fundación, es patrimonio de la humanidad”, sostuvo el realizador.
“Cuando ocurren las manifestaciones que vimos a partir del 18 de octubre, vemos una realidad que siempre estuvo. No es que Víctor de pronto apareciera, siempre estuvo en la celebración, en las fiestas y en las luchas, pero el 18 de octubre esto se hizo tan masivo. Fue impresionante”, reconoció.
Por otra parte, Cristián Galaz señaló que septiembre es un mes importante para la Fundación, ya que el próximo 16 se cumplen 47 años desde el asesinato del músico. En tanto, el 28 de septiembre se celebra su natalicio.
De acuerdo a ello, sostuvo que desde la Fundación han levantado un programa con el objetivo de mantener viva la memoria del compositor. Así, el 23 de septiembre, junto a la periodista Mónica González, la escritora Nona Fernández y la dirigenta Alicia Lira, lanzarán una nueva edición del libro Víctor, un canto inconcluso que Joan Turner publicó en 1983.
Mientras, el 26, 27 y 28 de septiembre, por medio de las redes de la Fundación se realizará una versión virtual del Festival Arte y Memoria que, desde hace tres años, se efectúa en el Estadio Víctor Jara. En esta oportunidad, el evento se desarrollará rescatando archivos inéditos y junto a la participación de músicos como Inti Illimani, Quilapayún y Nano Stern.