Los voraces incendios forestales que afectan la Región de Valparaíso, y en específico la comuna de Quilpué, han encendido las alarmas de las autoridades de gobierno y la opinión pública. Hasta ahora todo apuntaría, según la propia CONAF y el presidente Sebastián Piñera, a quemas intencionales en distintos puntos estratégicos de la zona.
En medio de esta compleja situación, el diputado de Convergencia Social y representante del Distrito Nº6 de la Región de Valparaíso, Diego Ibáñez, ha pedido que se ponga en la tabla en la Comisión de Medio Ambiente el proyecto de ley que busca prohibir el cambio de uso de suelo en los terrenos siniestrados, con el objetivo de evitar el avance de las inmobiliarias en una zona en la que la escasez hídrica y el cambio climático han causado estragos.
Desde la comuna de Quilpué, el parlamentario conversó con Radio Universidad de Chile sobre los alcances de la iniciativa y cómo ésta se vincula a la situación actual de los incendios forestales que afectan la región. “Hasta cierto momento estaba controlado, ahora se reactivó un foco y está muy cerca de la comunidad. Esperamos que las autoridades pongan todos los esfuerzos para controlar este siniestro que hoy se está reactivando“, relató el diputado de CS sobre el estado actual de la emergencia.
¿Se cree que sería intencional este incendio?
“Sí, de hecho, son múltiples focos los que comenzaron en la noche de ayer y eso da cuenta de que es absolutamente intencional. O sea, se hizo de tal manera, para los que conocemos este lugar, que se necesitaba una preparación para generar un incendio de este tipo. Por eso esperamos que el o los responsables puedan ser perseguidos y castigados”.
Usted ha pedido que se ponga en tabla el proyecto de ley que busca prohibir las inmobiliarias en suelos siniestrados. ¿En qué consiste y cómo se relaciona con la situación en Quilpué?
“Estos suelos generalmente son amenazados por proyectos inmobiliarios y sabemos que luego de las quemas se abaratan, se venden, se cambian los planes reguladores y se convierten en extensión urbana. La idea es justamente proteger estos suelos para reforestar y no tener que permitir que se instalen nuevas habitaciones, para proteger el bosque nativo.
Aquí se necesita priorizar la reforestación en una zona que es de escasez hídrica y que necesita, por cierto, que se controle la desertificación y la crisis climática”.
¿Se piensa que algunos de estos incendios pueden ser provocados por las mismas inmobiliarias para abaratar los costos de esos terrenos?
“Hay presunciones y hay algunos casos, al menos tres estudiados, en donde efectivamente luego de la quema se construyeron proyectos habitacionales. Hablamos de Valparaíso, San Antonio y de Quilpué.
Justamente estamos en un momento en el que hay una crisis habitacional, hay una proliferación de loteos irregulares. Eso sugiere que estos terrenos podrían eventualmente cambiar su uso de suelo y no ser destinados a reforestación, sino que justamente a la expansión inmobiliaria”.
¿Cree que eso podría ser lo que está pasando ahora? ¿Incendios intencionales, en focos específicos, con el fin de abaratar los suelos?
“Sí, por cierto. El proyecto justamente es para prevenir este tipo de intenciones y para proteger, tal como sucede en México o en España, por décadas estos suelos para que puedan ser recuperados con bosque nativo”.