Luego de que el Servicio Electoral actualizara la información sobre la Convención Constitucional, el sector de las artes quedó con un leve gusto amargo respecto de su participación en el debate que redactará la nueva carta fundamental. Esto, ya que de un total de casi 40 candidaturas relacionadas con las artes y las culturas, sólo tres alcanzaron los votos para llegar a la instancia: la actriz Malucha Pinto, el actor Ignacio Achurra y el escritor Jorge Baradit.
De esa manera, quedaron excluidos del debate personalidades como Marcelo Saavedra, candidato de Fuerza Cultural en el distrito 5; Rocío Veas Solís, artista plástica; Francisco Reyes, actor y ex presidente de Sidarte; Alejandra Jiménez Castro, directora de El Circo del Mundo; y Andrés Pérez Muñoz, compositor, director de orquesta y productor musical de jazz.
A esta extensa lista también se sumaron la actriz Andrea Gutiérrez, el actor Bastián Bodenhöfer, el escritor Ernesto Garrat y la poeta Rosabetty Muñoz. Del mismo modo, quedaron fuera de esta carrera el actor Mauricio Pesutic y el ex director del Museo Nacional de Bellas Artes, Milan Ivelic.
En ese sentido, Carlos Huckstadt, dirigente de la Asociación Gremial de Trabajadores de las Artes y el Espectáculos (AGTAE), manifestó que este panorama electoral da cuenta de un “pequeño paso” respecto de la defensa de los derechos culturales y que el resultado es bueno en vista de que las personalidades electas conocen de cerca las dinámicas del sector cultural.
“Si bien consideramos que no es un paso gigante, porque nos hubiese gustado que existieran más personas con propuestas hacia la cultura, también vemos el lado positivo. Es sumamente auspicioso que gente que viene de nuestro mundo, que conoce las sensibilidades que se producen en el mundo de la cultura, hayan podido entrar a este círculo de los constituyentes”, dijo.
“En este momento, la cultura ocupa un espacio muy reducido, por no decir nulo dentro de las políticas del Estado. Entonces, hay que abrirse un poco y cambiar el switch para darse cuenta que los que trabajamos en el mundo de la cultura necesitamos estar incluidos”, precisó el dirigente.
Para Mónica Illanes, secretaria general del Sindicato de Actores y Actrices de Chile (Sidarte), la evaluación es similar. Según indicó, los tres son personas preparadas para visibilizar los problemas del quehacer artístico. Además, se manifestó confiada de que otros candidatos se sumen a la defensa de los derechos culturales, sobre todo ante la necesidad de debatir temas como el fortalecimiento de la institucionalidad cultural y los cambios en los mecanismos de financiamiento del sector.
“Los temas relacionados con la cultura tienen que ver con las garantías de aperturas de espacio, que nos garanticen subvenciones, tener un ministerio que trabaje en conjunto con el sector y que tenga en cuenta la ley de artes escénicas que está en el Congreso. Que tengamos una Constitución que nos garantice diálogo, participación, vinculación y que esté siempre trabajando con nosotros para que esté atento a nuestras necesidades”, dijo la actriz.
Por su parte, el actor Ignacio Achurra, quien alcanzó la Convención Constitucional con más de 29 mil votos, sostuvo que “asegurar los derechos culturales en la nueva Constitución es algo prioritario”.
“Cuando hablamos de derechos culturales no sólo hablamos del acceso a las artes, al disfrute del teatro, la danza, la música. También hablamos de cuidar y proteger los sistemas culturales, las tradiciones, las formas, las prácticas que forman parte de nuestra cultura a lo largo y ancho del país. Tenemos una tremenda labor que realizar en reconocer y entender que esa diversidad cultural hace parte del valor y la riqueza de nuestro Chile”, añadió el ex presidente de Sidarte.
Mientras, el escritor Jorge Baradit, quien obtuvo más de 21 mil votos en los comicios, indicó que cualquier decisión de la Convención Constitucional debe ser abordada al calor de las demandas territoriales, sobre todo considerando la irrupción de las candidaturas independientes.
“Lo que necesitamos es un país constituyente. Lo que nos enseña la historia es que cada vez que los políticos se encierran en una caja de marfil a legislar, la gente se aleja de la política y en la política florece la corrupción, la desconexión”, dijo el autor en conversación con el programa Semáforo de nuestra emisora.
“Si esta Constitución no es desde abajo hacia arriba, no va a tener legitimidad. Entonces, necesitamos que las personas tengan una participación concreta, incluso vinculante con la constitucional. Necesitamos que los convencionales regresen a sus comunas, a los cabildos”, agregó.
En ese sentido, desde los gremios de la cultura plantearon que es importante no perder de vista el impacto de las artes y el patrimonio en la sociedad y que es necesario que nuevas voces se sumen a la puesta en valor de los derechos culturales. Por ello, desde el Sidarte y del Observatorio de Políticas Culturales generarán insumos con el fin de informar a los convencionales sobre los problemas del sector. Todo ello, con el objetivo de que la cultura no quede ausente del nuevo pacto social.