Antes de que terminen los Juegos Olímpicos de Invierno en Beijing, cuya clausura está fijada para el próximo 20 de febrero, el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan y el jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, proyectaron el ataque definitivo de Rusia sobre Ucrania. La advertencia fue verbalizada por Sullivan tras una reunión virtual del presidente estadounidense, Joe Biden, con sus principales homólogos occidentales, sosteniendo que “una invasión podría ocurrir en cualquier momento si Vladimir Putin decide ordenarla”.
“Podría comenzar durante los Juegos Olímpicos, pese a que se especula mucho que solo ocurrirá después de los Juegos”, indicó y si bien dijo desconocer si el líder ruso tomó la decisión, señaló que hay una “posibilidad muy clara” de que Rusia aseste la acción mortal.
En razón de esto, Sullivan llamó a los estadounidenses que se encuentran en territorio ucraniano a abandonar el país en las próximas 24 a 48 horas teniendo en consideración a que no hay “una perspectiva de una evacuación militar de Estados Unidos en caso de una invasión rusa”. Esto en cuanto “el presidente no pondrá en peligro la vida de nuestros hombres y mujeres uniformados enviándoles a una zona de guerra para rescatar a gente que podía haberse ido pero eligió no hacerlo”, advirtió.
El mismo llamado han realizado Reino Unido, Alemania, Noruega, Dinamarca, Italia y Letonia, así como Irak y Kuwait a sus connacionales presentes en el territorio en disputa en tanto hayan vuelos comerciales para hacer el abandono. España por su parte, cuyo Ministerio de Exteriores tiene registrado a 500 ciudadanos en Ucrania, aseguró que dispone de un dispositivo de evacuación de españoles si la situación lo ameritase.
Pero la urgencia manifestada por Estados Unidos fue considerada por la portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, María Zajárova como una “histeria” reveladora, sosteniendo que “los anglosajones quieren guerra a toda costa”.
Este sábado debe concretarse una conversación telefónica entre Joe Biden y Vladimir Putin según confirmó el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov a la agencia rusa Interfax. Una comunicación que se llevaría a cabo por petición de Estados Unidos.