El ministro de Hacienda, Mario Marcel, salió al paso de las críticas que apuntan a una falta de apoyo del Gobierno hacia las pequeñas y medianas empresas para ayudar en la implementación del salario mínimo que propondrá al Parlamento y que esperan llevar a los 400 mil pesos.
Junto con destacar una vez el acuerdo alcanzado con la Central Unitaria de Trabajadores en materia salarial, Marcel subrayó que se está trabajando en varias líneas para apoyar a las pymes, sector que dijo presenta una realidad dinámica y que deberá ser abordada durante toda la administración del Presidente Gabriel Boric.
“Con respecto de las pymes hay una agenda que es larga, que ya hay una parte que también está incluida en el Plan Chile Apoya, acceso al crédito por parte de las micro y pequeñas empresas no bancarizadas, apoyos en materia de productividad, algunos sectores que están más rezagados. Es decir, la agenda del Gobierno con las pymes es una agenda en continuo desarrollo porque además el mundo de la pyme es un mundo muy heterogéneo y muy cambiante. Creo que esto más que una medida, una reforma, es una agenda de trabajo que nos va a comprometer a lo largo de toda esta administración”, comentó Marcel.
Respecto del fondo del proyecto de salario mínimo, Marcel sostuvo que “es algo extraordinariamente valioso, considerando que no ocurrió de esa manera durante los años pasados”.
“Creo que lo más importante para el proceso legislativo es presentar nosotros el proyecto correspondiente, sus fundamentos y poder discutirlo con los parlamentarios y creo que va a ser sin duda un diálogo bien positivo, de tal manera que de aquí a un par de semanas que debería tomar este proceso tengamos buenas noticias para las trabajadoras y trabajadores y también para las pequeñas empresas la implementación de este acuerdo”, indicó el economista.
En relación a la reforma previsional que esperan implementar luego de los diálogos que ha impulsado el Gobierno, Marcel recordó que “en el programa de Gobierno se habla de un sistema previsional con cuatro niveles o cuatro capas. Uno, un beneficio básico universal que es la actual PGU con valores superiores a lo que se fijó cuando se legisló en la materia; un componente de capitalización en base a los aportes de los trabajadores; un aporte solidario, de seguridad social en base a los aportes de los empleadores; y un componente voluntario por encima de lo que sea obligatorio de acuerdo a la ley. Al interior de esas cuatro capas, por supuesto que hay muchísimo que trabajar en términos de la institucionalidad, de cómo se administran los recursos, cómo se determinan los beneficios. Todo eso es parte de lo que se va a ir recogiendo en estos diálogos”.
Por su parte, durante un encuentro en la sede de la OIT en Santiago, el presidente de la CUT, David Acuña, valoró el avance alcanzado con el Gobierno, considerando además que es un primer paso para mejorar las condiciones laborales de todos los trabajadores.
“Nosotros como central creemos fuertemente en el diálogo. Hemos partido planteándole al Presidente (Gabriel Boric) la necesidad de ratificar el Convenio 102 de la OIT para poder tener esta seguridad social integral. Hoy día la piedra la hemos puesto en pensiones. Tenemos muchos años conversando, tenemos muchos diagnósticos. Hoy es el momento que empecemos a ocuparnos y dejar de preocuparnos de las pensiones, sino que llevar a la realidad de las necesidades de las y los trabajadores poder tener una pensión justa y digna para todos”, subrayó el dirigente sindical.
En tanto, el presidente de la CPC, Juan Sutil, indicó respecto del diálogo para la reforma de pensiones “parte un proceso oficialmente, genuino de tratar de lograr acuerdo entre los trabajadores, los empleadores, el Gobierno, el Estado, para hacer un trabajo que ya lleva más de una década desde que Chile ingresó a la OCDE, más de 15 años en que no hemos podido lograr una reforma laboral”.
Sutil recordó que reformas sobre estos temas “presentó la presidenta Bachelet una, el presidente Piñera otra y ahora va a ser presentada una reforma laboral donde yo espero que el inicio de estos diálogos cumpla con tener muy presente la ciudadanía, los fondos de las pensiones, las futuras pensiones y generar los pilares que permitan resolver y ayudar con las pensiones de los que más lo necesitan. Esto en un marco de sustentabilidad y sostenibilidad al largo plazo, en un marco, como dijo el Presidente, de respeto por la propiedad de los fondos previsionales de los trabajadores y también buscando la manera de modernizar el sistema en función de lo que ocurre en otros países donde la seguridad social ha logrado ser efectiva, contributiva a los problemas de las personas”.