Este miércoles 5 de octubre se conmemoró el 34 aniversario del histórico triunfo del NO en el plebiscito de 1988. Un día en que no hubo acto oficial y que, si no es por la actividad que se realizó en el Museo de la Memoria y los Derechos Humanos, la fecha habría pasado sin pena ni gloria.
El propio ex presidente Ricardo Lagos lo dijo en su presentación en el acto realizado en una sala del museo que “me declaro culpable porque también se me había olvidado que hoy día era 5 de octubre”.
Hasta este lugar llegaron algunas personalidades que jugaron un rol importante en ese momento, como el ex ministro Luis Maira, el ex senador Andrés Zaldívar, el ex presidente Ricardo Lagos, el diputado Tomás Hirsh, que fue parte del Movimiento por Elecciones Libres. Además, como moderador de la actividad estuvo Alejandro Goic, que formó parte del Comando Juvenil por el NO.
El director ejecutivo del Museo, Francisco Estévez, afirmó que el triunfo del No en el Plebiscito es “parte del patrimonio político actual”.
Agregó que fue “un acto que se conquistó y se ganó, gracias a la ciudadanía. La ciudadanía que militaba en los partidos, por cierto, pero la que también estaba en las organizaciones sociales, en el mundo de la sociedad civil. Lo interesante de eso es que había un encuentro, entre la política organizada en los partidos y la sociedad civil organizada”, puntualizó Estévez.
Por su parte, en su intervención Luis Maira indicó que el 5 de octubre de 1988 fue una de los grandes momentos históricos en la vida de la patria.
“Fue la única ocasión desde que nos fundamos como Estado el año 1818 como país independiente, en que tuvimos una oportunidad decisiva para reafirmar nuestro sentido de la vida y el rumbo que queríamos para nuestra patria. Fundado en la decisión de la mayoría de los chilenos, orientado al progreso de nuestra sociedad, abierto a los mejores caminos que hicieran de Chile un país democrático, solidario y cada día más fuerte”, dijo Maira.
Indicó que “lo que habíamos perdido 15 años antes, lo recuperamos en hermosas jornadas que concluyeron en un día como hoy”.
Maira, ex dirigente de la Izquierda Cristiana, recordó que “para muchos de nosotros, el camino del fin de la dictadura era la culminación de la lucha social que se inició con las grandes protestas de 1983, que luego adquirió expresión programática más amplia en el Acuerdo Nacional en 1985. Que marcó jornadas sociales a perfilar en el año decisivo que lo ciframos como 1986 y luego de una acumulación significativa de fuerzas, que ya establecía nuestra condición minoritaria, el balance de ese año decisivo no arrojó finalmente ningún fruto y la Asamblea de la Civilidad fue exitosamente disuelta, sus dirigentes encarcelados y todos nosotros perseguidos después de promisorios inicios de esa Asamblea”.
En tanto, el ex presidente Ricardo Lagos también hizo un repaso por algunos momentos del período y destacó que ese 5 de octubre “fuimos capaces los que pensábamos muy distintos de ponernos de acuerdo, desde liberales hasta las posiciones ´más extremas´. No son extremas, son formas de entender distintas formas de dar una lucha, pero esas formas que parten por el respeto de los principios democráticos, es lo que nos permitió alcanzar el consenso”.
Indicó que esto es parte de un ejercicio cívico que es conveniente tener de vez en cuando, porque “las nuevas generaciones piensan que el futuro comienza con ellos y los presidentes tienden a pensar que el futuro también comienza con cada nuevo presidente”.
Lagos afirmó que “el cambio generacional es parte de la vida. Lo importante es entender que ese cambio generacional a veces hay otros cambios epocales que son mucho más importantes, como el cambio que estamos viviendo hoy en que nuestro concepto de una sociedad industrial que duró 200 años están en cuestión hoy día en que estamos en la época del cambio digital. Le agrego la pildorita del cambio climático y tiene entonces la necesidad de una constitución que se haga cargo de esto”.
Agregó que de tanto “hablar de democracia, la importancia del sistema digital es que un presidente hoy puede consultar todos los días si está de acuerdo con que quiero hacer en pensiones: marque uno, que está en desacuerdo marque dos, no quiero opinar marque tres. Nadie se lo impide y no me cabe duda que la Constitución algo de esto va a tener que existir, porque hay que darle herramientas al presidente para que de vez en cuanto, consulte a través de los medios digitales y sepa dónde está y no espere las próximas elecciones para saber si le va bien o mal”.
Por ello, ex presidente afirmó que ahora hay que ver “cómo la democracia la adecuamos al mundo digital, donde también se tiene que pensar de nuevo lo que son izquierdas y derecha en este mundo digital”.