El economista y ex Director General de Relaciones Económicas Internacionales, Osvaldo Rosales, afirmó que el hecho que el presidente Gabriel Boric participe en el Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) que se celebra en Tailandia, ya es una buena noticia, a propósito de las declaraciones del mandatario de volver al país con buenas noticias en materia de inversión y reactivación de la economía. No obstante, una “oposición destructiva” que lleva a arrinconar al Gobierno, genera una situación “bastante explosiva”, puntualizó.
En conversación con Radio y Diario Universidad de Chile, el experto analizó la importancia de estar en este foro internacional, por ser la zona más dinámica del mundo para establecer alianzas y espacios de negocios. Ese cuadro debe ser observado además teniendo en cuenta el carácter geopolítico ya que están presentes los países asiáticos en desarrollo, que enfrentan una situación parecida a la de América Latina, que tienen como su principal socio comercial a China, pero su “paragua de seguridad” lo entrega Estados Unidos y por tanto, no quieren quedar mal con uno ni con el otro.
En este punto, expresó Rosales, “América del Sur debiera tomar muy en serio de manera de fortalecer el vínculo con esas economías para tener un frente común, pero al mismo tiempo utilizar ese frente común para abordar temáticas de la economía global”.
Al respecto recordó que nuestras naciones, tanto en América Latina como en Asia, tienen poca incidencia en cuestiones como la reforma a la Organización Mundial de Comercio o el FMI y el Banco Mundial, en circunstancias que “resulta cada vez más relevante cuando todo indica que una fase de la globalización probablemente la exacerbación del apellido neoliberal parece estar danto término a esa fase”.
En ese sentido dijo que “hay que prepararse y tratar de definir los contornos mucho más compatibles con lo que todos hablan con el crecimiento que sea inclusivo y que sea sostenible”.
El economista afirmó que el hecho que el Presidente Boric esté presente en esta cita mundial, “ya es una buena noticia. Que tenga bilaterales con (Joe) Biden, con Xi Jinping, con (Justin) Trudeau, con el primer ministro japonés (Fumio Kishida). Recordemos que una de las características bastante negativas de la administración anterior fue un virtual aislamiento internacional”.
Por otro lado, indicó que establecer las bilaterales que permitan diversificar la red de contactos que tiene el país, tanto por las temáticas comerciales y las oportunidades de comercio, como con la coincidencia en la agenda global resulta fundamental.
Todo esto porque la forma en que se definen las reglas de juego terminan influyendo en la vida de las personas y desde ese punto de vista que “Chile muestre su compromiso con el medioambiente, que promueva la protección del mar, donde Chile está siendo un líder, y que trate de llevar los títulos generales que ha puesto Tailandia”, es crucial, precisó.
Además, subrayó que estos lineamientos “son los mismos que plantean todos los organismos internacionales: crecimiento inclusivo, sostenible con el medioambiente, que reduzca las desigualdades, que aborde la digitalización y aproveche la innovación para incorporar a las grandes mayorías a la oportunidad de crecimiento y desarrollo. El tema es cómo aterrizamos estos títulos a la vida cotidiana de las personas y eso se tiene que expresar en políticas públicas bien precisas”, indicó Rosales.
Al ser consultado si esto es posible con una posición dura en defensa del modelo neoliberal, el economista afirmó que “sigo confiando en que este juego opositor extremo que estamos visualizando se va a ver enfrentado muy rápidamente al repudio de la gran masa ciudadana”.
Rosales apuntó al respecto que “lo que se autodefinió como una oposición constructiva se ha transformado en una oposición abiertamente destructiva, bloqueadora y eso obviamente es una dificultad. Eso no debiera llevar a arriar las banderas de las transformaciones sociales, seguir avanzando en una reforma de pensiones, en una reforma tributaria y ojalá el próximo año también una reforma de salud, porque como van las cosas todo parece indicar que la derecha no está dispuesta para una reforma efectiva de pensiones, no está disponible tampoco para una reforma tributaria y lo que plantean son cosas que únicamente van en la dirección de arrinconar al gobierno”.
El economista recordó que dos ex presidentes del Banco Central, como Vittorio Corbo y Rodrigo Vergara, decían que era evidente que Chile requería de un incremento tributario de al menos 5 puntos del PIB. “La reforma que lleva a cabo el gobierno y bastante más modesta que eso. Por lo tanto, si fuera rechazada lo único que quedaría en evidencia que la derecha, más allá de todos matices y con todas las vestimentas que se presente, no está disponible para cambios significativos en la estructura económica y social chilena y eso obviamente va a en contra de lo que la inmensa mayoría de los chilenos busca”.