Un poco caótica fue la semana pasada para La Moneda. El crimen de tres funcionarios de carabineros en Cañete derivó en el aceleramiento de la discusión legislativa respecto a la agenda de seguridad, mientras la oposición celebró haber “pasado máquina” en aspectos claves de los proyectos impulsados por el Gobierno. El broche final fue la última encuesta Plaza Pública Cadem que develó un 24% de aprobación para el Presidente Gabriel Boric.

La cifra es la más baja que ha obtenido el Mandatario en toda su administración. Para evitar abrir un nuevo flanco, las voces de gobierno y presidentes de partidos oficialistas, desestimaron que el porcentaje sea reflejo de un problema mayúsculo.

La ministra del Trabajo, Jeannette Jara, quién reemplazó este lunes a la vocera de Gobierno, Camila Vallejo, sostuvo que “las encuestas son efectivamente fotografías del momento, y nuestro deber y esfuerzo está puesto en gobernar y mejorar la gestión. Las miramos, por cierto, y ponemos atención a los puntos que la ciudadanía va relevando, que nos parecen importantes, pero no son las que guían nuestro actuar ni tampoco comprometen nuestras acciones diarias”.

En tanto, Diego Ibáñez, presidente de Convergencia Social, partido al que pertenece el Jefe de Estado, señaló que la baja aprobación “puede responder a múltiples factores” y recalcó que “a nosotros no nos quita el tiempo analizar las encuestas, sino preocuparnos justamente de combatir la inseguridad que hoy es la principal prioridad de este gobierno”.

En la oposición apuntan directamente a la gestión de la crisis de seguridad. Fue la propia carta presidencial de Chile Vamos, la alcaldesa de Providencia, Evelyn Matthei, quién sostuvo que la baja aprobación del Presidente “tienen que ver con lo que está sufriendo hoy día la ciudadanía, que es una sensación de desprotección brutal“.

“El asesinato brutal de los tres carabineros obviamente que tiene que ver con una sensación de la ciudadanía de que los delincuentes, que las mafias, están en el fondo mostrando su fuerza y el control territorial que tienen”, dijo.

El diputado de RN, Andrés Longton, destacó que “esto es la consecuencia de no haber tenido un programa de Gobierno o no haber visto una realidad que era compartida por gran parte de los chilenos, de que la seguridad tenía que ser la prioridad número uno, dos y tres en nuestro país”.

En la UDI, el diputado y jefe de bancada de la colectividad, Juan Antonio Coloma, indicó que “históricamente hemos visto al Presidente Boric hablándole a la izquierda. Hoy día, con las constantes volteretas, uno ya no sabe a quién le habla el Presidente“.

Nerea Palma: “Las convicciones con las que empezó el Gobierno se han ido diluyendo”

La interpretación que hacen desde la academia releva un factor en particular: la renuncia o las convicciones matizadas. La cientista política de la Universidad Diego Portales (UDP), Nerea Palma, llamó a ser cautos con las proyecciones a realizar, dado las limitantes metodológicas que presenta el sondeo, pero sí advirtió que funciona como “termómetro” ante ciertas preguntas.

La académica relevó que la baja en la aprobación presidencial es “estadísticamente significativa” considerando que supera el error muestral y que “el 30% que tenía Gabriel Boric pareciera que era invariable respecto a variables económicas”, esto dado a que en presidencias anteriores dicha cifra flúctuaba mayormente dependiendo de los niveles de inflación y crecimiento.

En esa línea, Palma señaló que el resultado de la encuesta semanal “muy probablemente tiene que ver a que hemos visto que el Presidente Boric ha renunciado a símbolos que eran cimientos de su Gobierno, sobre todo relacionados con el estallido social”.

“El ‘perro matapaco’ era un símbolo. Entonces, no creo que sea solamente por eso, pero es una muestra de que en general las convicciones con las que empezó el Gobierno se han ido diluyendo con el tiempo, y en su base de apoyo del 30% creo que le puede pasar la cuenta al Presidente Boric”, planteó.

Asimismo, en cuanto a la crisis de seguridad, Nerea sostuvo que influye “la cesión de la agenda de seguridad a lo que dicta la oposición”, porque si es que vemos “declaraciones del oficialismo versus la oposición, parecieran haber menos diferencias de las que podríamos haber pensado hace tres, cuatro años, entonces eso también puede ser que esté minando la base electoral de, en este caso, la aprobación presidencial”.

“Tendería a pensar, como había sido estable el 30%, que quizás la seguridad, y en materia de legislación de seguridad, ya no cala tan hondo en la aprobación presidencial, pensando que el Poder Ejecutivo y el Legislativo son dos órganos que son independientes”, añadió.