“El deporte también tiene una gran fuerza social, capaz de unir pacíficamente a personas de diferentes culturas“, declaró el pontífice durante el rezo del Angelus en la plaza de San Pedro.
“Espero que este acontecimiento pueda ser un signo del mundo inclusivo que queremos construir y que los atletas, con su testimonio deportivo, sean mensajeros de paz y buenos modelos para los jóvenes en particular”, añadió el papa, de 87 años.
Según la antigua tradición, las Olimpiadas son una oportunidad para establecer una tregua en las guerras, demostrando un sincero deseo de paz”, sentenció el jesuita argentino.
Los Juegos Olímpicos tendrán lugar del 26 de julio al 11 de agosto y los Paralímpicos del 28 de agosto al 8 de septiembre en la capital francesa.