Este domingo 18 de agosto se dio el puntapié inicial de la edición número 20 del Santiago Festival Internacional de Cine, conocido popularmente por sus siglas SANFIC. Uno de los certámenes audiovisuales más importantes de Sudamérica que este 2024 se extenderá hasta el 25 de agosto, y que pondrá a disposición del público chileno un total de 92 películas que incluyen 20 premieres mundiales, 13 latinoamericanas y 52 nacionales.
“Hay documentales, ficciones, buena participación de cine chileno, que está en un muy buen momento, y también películas internacionales para todo tipo de público”, comentó hace algunos días Carlos Núñez, director artístico de SANFIC, en conversación con Radio y Diario Universidad de Chile.
A las funciones -que tendrán lugar en las sedes de Cinépolis (ex-Cine Hoyts) en La Reina, Vivo Imperio, y Los Domínicos; Sala Ceina del Centro Arte Alameda y en la Cineteca Nacional de Chile-, se suman una serie de actividades gratuitas ligadas a SANFIC Educa y SANFIC Industria, dos divisiones del mismo festival que ofrecerán varias actividades gratuitas a lo largo de esta semana.
La cita inaugural se llevó a cabo en el Teatro CorpArtes y contó con la presencia de varias de las personalidades más importantes del cine criollo. Entre ellos, los directores Maite Alberdi, Sebastián Lelio y Pablo Larraín, bautizados por los especialistas de la cita como el “big three chileno”, quienes este año fueron reconocidos con un importante galardón dedicado a su trayectoria.
Premiación que, según compartieron los cineastas, reciben con especial cariño, pues ven reflejado en SANFIC parte de lo que ha sido su propio camino dentro de la industria. “Hace 20 años estrené mi primer cortometraje de escuela, que fue el primer documental que hice. Se llamaba ‘Los trapecistas‘. Haciendo ese documental descubrí que me interesaba trabajar con la realidad. Fue mi primera aproximación a un género con el que me sentí cómoda. Y SANFIC tenía su categoría ‘Talento nacional para estudiantes‘”, compartió la directora de “El agente topo” sobre su conexión con el evento.
“Recuerdo que fui al estreno con mi mamá, mi abuela y las amigas de mi abuela, que eran las señoras de ‘La once’, en el primer SANFIC. Y las amigas de mi abuela, en la función, perseguían al jurado para preguntarles qué les había parecido mi cortometraje. Ese fue mi primer pie en la industria: muriéndome de vergüenza siendo una estudiante y con mi abuela exigiendo explicaciones sobre mi cortometraje. Fue muy significativo y es muy importante SANFIC para mí. Es un espacio que nos ha invitado a los cineastas desde el inicio, que nos ha acogido en nuestros primeros pasos y en cada paso que hemos dado. Y siento que ha crecido de la mano de la industria chilena. Eso lo agradecemos mucho todos los cineastas que hemos visto cómo se ha ido desarrollando tanto el festival como nosotros”, afirmó Alberdi.
Palabras que fueron compartidas por Lelio, ganador del Oscar a Mejor película extranjera con “Una mujer fantástica”. “La emoción es lo que me embarga en este momento, de estos 20 años que engloban una etapa de la historia del cine chileno que ha sido muy particular y de la que ha sido muy emocionante ser parte. Hemos crecido juntos, a punta de costalazos y a veces de uno que otro acierto, pero también de colaboración. Ha sido una generación en la que ha existido camaradería y sobre todo el encuentro de personas que tenían cine y películas adentro, y que hace 20 años no teníamos la menor idea de cómo realmente canalizar esa fuerza para que se convirtiesen y terminaran siendo películas”, expresó el director.
“El 2005 fue el año en que estrenamos Pablo (Larraín) y yo nuestras primeras películas, cerca del primer SANFIC. Me parece que lo que está pasando hoy es algo así como el momento en que una generación completa se reconoce a sí misma, se mira y hace algo que es muy escaso en este país, que es agradecer la contribución del otro. Yo me siento honrado por este gesto de cariño y quiero decir, además, que haber hecho este viaje junto a los camaradas Maite, Pablo y tantos otros amigos de esta generación ha sido un regalo total. Así que muchísimas gracias por eso”, finalizó con emoción.
Por su parte, Larraín, quien es uno de los creadores chilenos que mayor desarrollo ha tenido en el extranjero con producciones como “Jackie” y “Spencer“, agradeció a todos sus colaboradores y recordó a la gestora cultural Soledad Saieh, cofundadora de la Fundación CorpArtes que falleció el 2017. “Agradecer a la mejor actriz que conozco, que se llama Antonia Zegers, al mejor actor que conozco, que se llama Alfredo Castro. Y agradecer al ánimo de la gente por creer que el cine es posible, que hay un lenguaje que descubrir. Que la rabia, los amores y las iras se pueden filmar”, sentenció.
Seguir haciendo industria
La iniciativa detrás de SANFIC no solo es valorada por los directores. En el mundo actoral, la existencia de un espacio como este igualmente despierta un sentimiento de agradecimiento en torno a los esfuerzos por seguir construyendo industria nacional. “Es bueno que existan estas instancias donde se impulsa el cine, donde hay conversación respecto a la industria, donde se presentan 92 películas de Chile y del extranjero. Donde hay también una parte dedicada al mundo infantil o neurodivergente. Creo que son instancias que hay que aprovechar”, comentó el actor Francisco Reyes, quien este año estrenará la película mexicana “Martínez” en el marco del festival.
Una postura que igualmente resonó en Alfredo Castro, otro de los grandes intérpretes de nuestro país. “El cine nacional afuera es súper importante. El cine chileno afuera brilla como uno de los más importantes, más productivos, más creativos en el extranjero. No así en Chile, donde la gente no va al cine. Pero tú ves que congrega mucha preocupación y atracción de parte del público y los medios. Poco a poco vamos avanzando”, afirmó.
Por otro lado, ambos han sido colaboradores estrechos de Sebastián Lelio y Pablo Larraín, respectivamente. “Es muy importante que los reconocimientos sean hechos cuando la gente está productiva. Tanto Sebastián como Pablo y Maite han hecho un trabajo excelente, han aportado mucho al cine y me parece totalmente lógico que se les reconozca mientras están productivos”, valoró Reyes sobre la distinción entregada a los creadores, donde también fue galardonado el histórico periodista estadounidense John Hopewell, editor de Variety, por su rol en la difusión del cine iberoamericano.
En esa misma línea, el actor aprovechó de compartir parte de su experiencia protagonizando -junto a Daniela Vega– la película que le dio el Oscar a Chile. “Fue una experiencia inolvidable, impresionante. Tremendamente efímera, con un enorme glamour estar ahí, en el Dolby Theatre. Era la industria máxima del cine mundial. Subir a ese escenario durante 15 segundos era una locura de adrenalina y al día siguiente solo volaban las hojas en las calles, no existía nada más. Se había acabado toda esa enorme energía que se produce durante esa entrega de Oscares, que es maravillosa por eso mismo. Son cosas que las tomo así. Son momentos bellos de la vida, efímeros”, recordó.