Pelequén: Vecinos logran acuerdo con Intendente pero se mantienen en alerta

Los locatarios indicaron que llegarían “hasta las últimas consecuencias” para lograr que se solucione la pestilencia y las plagas de insectos emanadas del funcionamiento de la Planta de Tratamiento de Residuos Orgánicos Colhue. Intendente de O´Higgins comprometió una nueva revisión de la Comisión de Evaluación ambiental para abordar las irregularidades que existirían en la central.

Los locatarios indicaron que llegarían “hasta las últimas consecuencias” para lograr que se solucione la pestilencia y las plagas de insectos emanadas del funcionamiento de la Planta de Tratamiento de Residuos Orgánicos Colhue. Intendente de O´Higgins comprometió una nueva revisión de la Comisión de Evaluación ambiental para abordar las irregularidades que existirían en la central.

Para este viernes quedó programada una sesión de trabajo de la Comisión de Evaluación Ambiental donde se revisarán las irregularidades en el funcionamiento del  Centro de Manejo de Residuos Orgánicos de la empresa Colhue S.A, que mantuvo a la comunidad de Pelequén con fuertes manifestaciones durante todo el fin de semana.

La medida se anunció luego que el Intendente de la Región del Libertador Bernardo O´Higgins se reuniera con los dirigentes de la zona este lunes en la tarde.

Según denuncian los locatarios, los procesos productivos desarrollados por la central están generando malos olores incompatibles con la salud de las personas que viven en los sectores aledaños a la planta, además de exacerbar la presencia de moscas y de contaminación acústica por el paso de los camiones de carga.

Un problema que, si bien, se acentuó después del terremoto de febrero de 2010, ya se venía arrastrando desde 2008, año en que la Corema de O´Higgins aprobó la Declaración de Impacto Ambiental presentada por la empresa, que inició sus labores en 2009.

Y aunque entidad gubernamental determinó que los estándares del proyecto se adecuaban a la institucionalidad vigente, en la práctica, tanto el municipio como los vecinos han constatado que la compañía no estaría cumpliendo con los elementos que fueron presentados en la declaración.

“Hay una serie de situaciones que lamentablemente la empresa no ha materializado. En marzo de 2010, ellos estaban autorizados para ingresar 160 toneladas/día y transportaron 1800. En ese periodo se ingresaron 36 mil toneladas de materia, entonces eso ha provocado los malos olores y la contaminación tanto acústica como ambiental que se produce cuando van pasando 60 camiones con 30 toneladas durante todo el día”, dijo el alcalde de Malloa, Luis Barra.

De hecho, en marzo de 2010 la misma Corema cursó una multa de 5 UTM en contra de Colhue por incumplimientos a la Resolución de Calificación Ambiental donde se precisaba – entre otras cosas – que la compañía no tenía cobertura de lodos dispuestos en zanjas,  lo que  provocaría la proliferación de moscas.

Posteriormente, en 2011 el subsecretario de Medio Ambiente, Ricardo Irarrázaval,  realizó una nueva fiscalización en la que se volvió a constatar que la planta no había implementado las medidas necesarias para que su funcionamiento se adecuara a la aprobación del proyecto.

Otra deficiencia sería la ubicación de la central. En el documento que se evaluó se asegura que ésta se emplazaría a tres kilómetros al nororiente de Pelequén, pero de acuerdo a los cálculos de los locatarios, la central funcionaría a 590 metros del poblado y a 1.700 metros del acopio de agua.

Sin embargo, según comentó el dueño de la central Colhue, Germán Pardo, estos requerimientos ya se habrían solucionado. El empresario indicó que, precisamente, después del terremoto la central se tuvo que hacer cargo del procesamiento de una mayor cantidad de toneladas de lodo a raíz de la emergencia, pero que esa situación se extendió sólo durante dos meses y que además se hizo contando con los permisos de los servicios correspondientes.

De todas formas, Pardo cuestionó fuertemente el rol de las autoridades en la materia y afirmó que “si quieren cerrar, no hay problemas, lo hacemos, pero que el Intendente responda qué quieren hacer. ¿Se va a potenciar este tipo de plantas o no? He enviado muchas cartas para ver cuál es la política ambiental en este sentido”.

En tanto, la presidenta de la Unión comunal de Juntas de Vecinos de Pelequén, Adelina Sánchez, comentó a la tercera edición de RadioAnálisis de nuestra emisora que después de tanto tiempo sin soluciones, los vecinos están dispuestos a llegar a las últimas consecuencias para defender su derecho a vivir en un medio ambiente libre de contaminación. “La gente aquí ya no quiere parar. Este lunes hubo varios cortes y estábamos esperando que el Intendente se reuniera con las personas”, sostuvo la dirigente.

La revisión de la Comisión de Evaluación de impacto ambiental quedó supeditada, en todo caso, al término de los bloqueos de caminos en el sector.





Presione Escape para Salir o haga clic en la X