A un mes del cierre de la 64 reunión de la Comisión Ballenera Internacional (CBI) en Panamá, 52 organizaciones latinoamericanas e internacionales enviaron una carta a los comisionados de la región en la CBI, conocidos como Grupo Buenos Aires, reconociendo su labor en defensa de las ballenas y solicitando nuevas acciones en el futuro.
Desde Chile, la carta fue firmada por el Centro de Conservación Cetácea (CCC), Ecocéanos, Defensa Ballenas, Fundación Melimoyu, Grupo de Acción Ecológica Chinchimén y el Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales (OLCA).
Las organizaciones destacaron, por ejemplo, la restitución del voto como mecanismo de decisión. Esto, según la directora ejecutiva del Centro de Conservación Cetácea, Elsa Cabrera, porque el consenso es “imposible” en la CBI, dividida entre los países que apoyan la caza de ballenas para el consumo y los que las utilizan mediante métodos no letales.
Asimismo, el documento destaca como “histórico” que un 65 por ciento de los miembros de la CBI votara a favor de la creación del Santuario de Ballenas del Atlántico Sur.
Aun cuando la moción requiere un quórum de 75 por ciento para ser aprobada, Elsa Cabrera sostuvo que es un buen paso para lograr que la iniciativa se implemente en la próxima reunión de la CBI: “Esto no se ha podido lograr principalmente porque hay un bloque de países que vota junto con Japón a cambio de programas de financiamiento pesquero o incluso sobornos a oficiales de países de África y el Caribe, en lo que se conoce como la compra de votos que realiza el gobierno de Japón al interior de la CBI. Sin embargo, a pesar de esto, es súper importante que se haya obtenido un 65 por ciento de la mayoría, incluso el voto favorable de Gabón, que antes no apoyaba este tipo de medidas”, dijo.
Sin embargo, las organizaciones que enviaron la carta subrayan que aún es necesario enfrentar desafíos pendientes. En ese sentido, llaman la atención sobre la presión de algunas naciones para eliminar la moratoria e influenciar la aprobación de propuestas que amenazan la conservación y uso no letal de los cetáceos.
En particular, el documento llama a tomar acciones urgentes contra la llamada “caza científica” de ballenas que realiza el gobierno de Japón en aguas australes.
Al respecto, la directora del Centro de Conservación Cetácea, Elsa Cabrera, indicó que la presión internacional es clave. Por ejemplo, explicó, recientemente Corea del Sur había anunciado que preparaba programas de caza científica, pero tuvo que retractarse ante la presión de países como Australia, Francia y Estados Unidos, ente otros.
Eso, dijo Elsa Cabrera, es un indicador de las medidas que se deben tomar: “Creemos que la eliminación de los programas de caza científica depende mucho de la presión que pueda generar la comunidad internacional y en esto, como CCC, reiteramos un llamado a los gobiernos a justamente comprometerse a realizar acciones tendientes a eliminar este tipo de operaciones, que pretenden ser científicas pero están violando la moratoria, toda vez que la escala de la captura es comercial”, explicó.
La Comisión Ballenera Internacional comenzará ahora a reunirse cada dos años, por lo que las organizaciones solicitaron al Grupo Buenos Aires que mantenga y fortalezca sus reuniones periódicas y que éstas se efectúen al menos una o dos veces al año para abordar los escenarios venideros.