Un estudio elaborado por la Facultad de Medicina de la Universidad Católica arrojó que un 24 por ciento de los menores de entre 10 a 14 años presenta alteraciones del ánimo.

Sin embargo, el dato más alarmante es que el 1,2 por ciento de ellos afirmó haber experimentado ideas suicidas, posicionando a Chile como el segundo país a nivel mundial con el mayor aumento de la tasa de suicidios adolescentes en el último tiempo, por debajo de Corea.

Según el ministro de Salud, Jaime Mañalich, estos indicadores son “una señal máxima, una alerta roja a la cual tenemos que atender y poner todo lo que esté en nuestras manos para salir de esta tendencia tan fatídica”, sostuvo.

Pese a ello, al ser consultado por las acciones que está emprendiendo la autoridad para reducir esta tendencia, el secretario de Estado reconoció: “Tú pregunta es demoledora, porque estamos haciendo casi nada”, dijo.

El ministro Mañalich agregó que “la decisión de estar muerto o seguir con vida se genera a través de una serie de elementos que difícilmente se detectan a tiempo”, por lo que puso énfasis en la identificación de las señales para disminuir la tasa de suicidio adolescente.

“Un joven que se suicida es un fracaso para toda la sociedad, significa que no entendimos las señales de alarma a tiempo, que sus compañeros no generaron un ambiente favorable, que hubo bullying escolar, hubo problemas psiquiátricos que no fueron diagnosticados oportunamente”

En relación a la conducta sexual de los jóvenes, el estudio -encargado por los ministerios de Salud y Educación-  indicó que el 40,3 por ciento dice usar condón y el 35,7 por ciento, anticonceptivos.

Pese a la corta edad de la muestra, la investigación arrojó que el 11,9 por ciento padece alguna enfermedad crónica y el 14 usa medicamentos.

Del total de 18 mil 450 casos consultados, un 45,7 por ciento sufre de sobrepeso u obesidad; un 20,7 agudeza visual alterada y un 16,9 por ciento presenta problemas relacionados a la salud bucal.