No se han reunido y tampoco lo harán, al menos en el corto plazo. Así lo señalaron Miguel Crispi, coordinador general de Revolución Democrática, y Patricia Morales, presidenta del Partido Progresista.

Ambos dirigentes descartaron que se esté iniciando un proceso de negociación formal entre ambas colectividades para elaborar una lista parlamentaria conjunta que compita con la Alianza y la oposición el 17 de noviembre de este año.

Lo que sí hay, al menos desde el PRO, es la intención de reunirse, dialogar y acercarse a distintos dirigentes y agrupaciones políticas, entre ellas el movimiento liderado por el ex dirigente universitario, Giorgio Jackson.

Así lo señaló Patricia Morales, quien afirmó que “los progresistas están abiertos a todos aquellos que quieran un cambio para Chile”.

“Eso significa, obviamente, tener un diagnóstico común sobre lo que han sido las cúpulas de la Concertación y también congeniar propuestas fundamentales como una nueva Constitución y el derecho universal a la educación. A partir de ahí nosotros queremos sumar la mayor cantidad posible de independientes, movimientos sociales, estudiantes, siempre estamos abiertos para eso”, precisó.

Morales agregó que “nosotros somos super respetuosos de los procesos de cada cual. Yo entiendo que ellos han estado en un proceso de acercamiento con la Concertación y difícilmente nos podemos meter en eso, pero sí hemos reiterado que nuestras puertas siempre están abiertas”.

En Revolución Democrática también están en etapa de dialogar con diversos actores, pero “sin el ánimo de conformar una lista formalmente, anclada a un partido”, según advirtió su coordinador general Miguel Crispi.

El vocero de RD aseguró que la colectividad está enfocada en la recolección de firmas de las candidaturas de Carlos Zanzi, por el distrito 21 de Ñuñoa-Providencia; Francisco Letelier, por el 37 de Talca, y Giorgio Jackson, por el 22 de Santiago.

Crispi aseguró que no se descarta ningún escenario, inclusive la modificación de las candidaturas, ya que “todavía queda tiempo para las elecciones”.

“El plazo para cerrar los pactos es en agosto, para cambiarse de distrito es el 20 de julio. Nosotros, debido a un principio de año muy intenso, haciendo el esfuerzo para estar en las primarias de la convergencia opositora y la Concertación no lo logramos, ese trabajo fracasó. Hoy día estamos con calma, diseñando nuestros programas, no descartamos conversar con nadie, con el PRO o con el Partido Radical, el Partido Socialista, con todos hay que juntarse: si se fragmenta la izquierda gana la derecha así que por supuesto vamos a tener que sentarnos a conversar”, expresó Crispi.

Luego del fracaso en la conformación de una planilla parlamentaria de la oposición, las críticas hacia Revolución Democrática, emanadas especialmente desde el movimiento estudiantil, se acrecentaron.

De ello se hizo cargo Miguel Crispi, asegurando que la vocación de poder no permite la marginación política.

“Revolución Democrática tiene, por una parte, una naturaleza movimientista pero por otra parte tenemos vocación de poder y eso significa que uno tiene que tener la capacidad de construir con otros. Nosotros somos un movimiento de izquierda pero la centro izquierda es mucho más grande y para hacer los cambios se necesita a todos ellos. Nos parece una mirada miope pensar que uno solo va a cambiar el mundo, tiene que hacerlo con otros, y eso manteniendo la identidad, manteniendo ciertos límites y distancias”, aclaró.

El dirigente señaló que la recolección de firmas no es compleja, ya que, dada la baja votación de las últimas elecciones municipales, la exigencia bordea las 500 rúbricas por distrito. El gran desafío, entonces, es derrotar “el sistema binominal”.