Distintos informes de inteligencia de Carabineros y el ministerio del Interior derivaron en un plan preventivo de seguridad, impulsado por esta cartera, que busca disminuir los delitos y corte de calles durante la conmemoración de los 40 años del Golpe de Estado.

El plan comenzó hace una semana y se extenderá hasta el próximo 11 de septiembre.

Recordemos que el 26 de agosto, tres buses fueron incendiados cerca de Villa Francia, en Estación Central, un supuesto atentado que fue cuestionado por los vecinos, dada la numerosa presencia de efectivos policiales en la zona, incluso durante la jornada que se registró este hecho.

Lucía Dammert, socióloga experta en seguridad, señaló que los operativos deben responder a información real, con datos comprobados a posterior para certificar una reducción de los delitos, y no enfocarse en suprimir previamente cualquier tipo de manifestación social por esta fecha.

“El problema sería que se realicen operativos policiales para evitar manifestaciones sociales. Si hay alguna información de inteligencia que dice que van a ocurrir hechos delictuales, tiene que actuar el Gobierno. Pero sin información, termina siendo un proceso de estigmatización ciudadana, genera más violencia que evitándola. Es necesario revisar después del 11 de septiembre las consecuencias del operativo, la gente procesada y realmente vinculada a hechos delictuales”, dijo.

Desde organizaciones vecinales desmienten las palabras del ministro Andrés Chadwick, quien anunció un trabajo en conjunto con los vecinos. Lautaro Guanca, dirigente de pobladores en Lo Hermida, en Peñalolén, destaca que los planes del Ejecutivo no derivan en reducir los niveles de narcotráfico o delincuencia: “Operativos de seguridad han fracasado rotundamente, no se ha decomisado ni un gramo de pasta base de las poblaciones, los problemas de seguridad no se han resuelto, pero la represión y persecución, arrestos e interrogatorios se han vuelto pan de cada día”.

Inés Encina, dirigente de Villa Francia, indicó que los desvíos de buses del Transantiago afectan a trabajadores y tercera edad, los que son asaltados al recorrer grandes distancias hacia otros paraderos, lo cual no es advertido por la fuerza pública.

La dirigente indicó que “es molesto e innecesario lo que hace el Gobierno, quiere crear terror en la población. Hay gente que está caminando lejos a las micros, llegando a otras villas, y hay gente que se aprovecha de esto, lumpen que asalta a esa gente. Con toda la presencia policial que hay, no se frena. Los carabineros no están para frenar la delincuencia, está creando temor. Me gustaría ver una medición si han bajado los delitos”.

Justamente, en Estación Central se inició la semana con incomodidad por la numerosa presencia de carabineros, incluso con carros lanzagases estacionados afuera de una escuela básica.

El concejal de esta comuna, Felipe Zavala, indicó que hay vecinos molestos por la estigmatización: “Es una idea que no comparto. Si queremos proteger a la ciudadanía, tenemos que proteger los accesos a cada una de las poblaciones, y no quitar el acceso a transporte público. La comunicación desde el municipio y el Gobierno no ha sido efectiva. La gente plantea una rabia por la estigmatización del sector. Son actos reprochables, pero no es toda la comunidad, y habitan un gran porcentaje de gente que está siendo marginada y excluida”.
Son trece puntos de la capital contemplados con aumento de vigilancia, en sectores como Lo Hermida, La Victoria y Villa Francia, además de otros puntos en Macul, Santiago Centro y Huechuraba. Consultados por Radio Universidad de Chile, el departamento de comunicaciones de Carabineros señaló que la institución no emitirá declaraciones sobre este operativo.