Este miércoles, el juez Sergio Muñoz, reconocido por investigaciones vinculadas a la dictadura de Augusto Pinochet, fue electo por sus pares como el nuevo presidente de la Corte Suprema de Justicia.

El magistrado se desempeñaba como presidente de la Tercera Sala del máximo tribunal y alcanzó notoriedad por el rechazo de varios proyectos energéticos y casos sobre alzas de las Isapres, y llega en reemplazo de Rubén Ballesteros, en un cargo que asumirá el próximo 6 de enero que ocupará hasta fines de 2015.

Los jueces cumplen así la tradición de nombrar como autoridad de la Suprema a quien es la máxima antigüedad judicial, que paradójicamente, a los 56 años de Sergio Muñoz, recae esta vez en el más joven que se ha elegido en el último tiempo.

Respecto de este punto, el recién electo presidente de la Corte indicó: “No tengo claridad respecto de ser el ministro más joven que haya llegado a la presidencia de la Corte Suprema. No sé si será una cualidad positiva. Espero tener el rigor para desempeñar el cargo Hay otros presidentes que han dejado la vara muy alta en este sentido”.

Cabe destacar que el juez Sergio Muñoz se hizo conocido por estar detrás de la investigación del caso Spiniak y varias causas de derechos humanos, como por ejemplo, el homicidio del presidente de la ANEF, Tucapel Jiménez por agentes de la CNI.

Además, estuvo a cargo de la indagación de las cuentas del Banco Riggs en que persiguió a Pinochet y otras personas bajo el delito de malversación de fondos públicos, luego de descubrirse la existencia de cuentas bancarias secretas en Estados Unidos.