Darío Díaz es un joven estudiante que ve cómo su colegio, el Instituto Nacional, se convierte en uno de los epicentros de las movilizaciones estudiantiles de 2011. Miguel Ángel Miranda es un empresario e instructor de tenis que fue torturado durante la dictadura y mira las protestas con algo de distancia. Ambas historias se cruzan en las “1800 horas por la educación”, la manifestación de la que participaron miles de personas y que consistía en una corrida constante alrededor de La Moneda.
Este es el eje de El vals de los inútiles, el documental de Edison Cájas que este jueves se estrena en cinco salas de Santiago y otras nueve ciudades de Iquique a Punta Arenas.
La cinta fue premiada en el Festival de Cine de Valdivia y en Fidocs y también ha sumado reconocimientos en certámenes de Buenos Aires, Mar del Plata, Locarno, Estambul y Marsella, entre otras ciudades.
Aunque ha sido presentada como un retrato del movimiento estudiantil, su autor tiene algunas precisiones para ese rótulo: “Lo que entrega este documental es una mirada un poco más íntima. No es un retrato del gran movimiento estudiantil porque es imposible hacerlo. Lo que sí hace es emocionar a través de estas dos historias, que son las historias de un país completo. La historia de Miguel Ángel tiene que ver con la gente que vivió la represión durante la dictadura y la de Darío es la del estudiante, la del chico joven que sale a protestar y quiere transformar las cosas a través de la calle”, explicó en el programa Radiópolis de Radio Universidad de Chile.
“Es una mirada un poco más personal, no tiene que ver con la gran historia del movimiento, pero a la vez sí se relaciona a través de estas dos miradas”, añadió.
Esa idea se traduce también en las imágenes. Para alejarse de los registros que difundían los medios de comunicación tradicionales, el documental opta por planos fijos, secuencias largas y tomas que lo emparenta con realizaciones de ficción.
“Eran decisiones complicadas de estar siempre quietos, incluso sin trípode, porque eso era lo que queríamos para la película. Era un poco difícil mientras las lacrimógenas volaban encima”, dijo Edison Cájas. “Pero queríamos que el documental se viera así, huyendo de lo que aparecía en las noticias y en YouTube todo el tiempo. Incluso me hubiera gustado tener más cuidado en algunos planos y tomas, pero era lo que se podía hacer en el escenario en que estábamos”.
El vals de los inútiles, de Edison Cájas, se estrena este jueves en Santiago (Cineteca Nacional, Museo de la Memoria, Cine Pavilion, Cine Radical y Café Literario Parque Balmaceda), Iquique (Teatro Estibadores Marítimos), La Serena (Teatro Centenario), Ovalle (Centro Cultural Municipal), Valparaíso (Teatro Condell), Chillán (Cine Club The Oz), Concepción (Balmaceda Arte Joven y Centro Cultural Alianza Francesa), Valdivia (Cine Club Universidad Austral), Puerto Montt (Sala Mafalda Mora, Centro Cultural Diego Rivera) y Punta Arenas (Cine Estrella).