Vecinos del proyecto Alto Maipo y organizaciones ambientales se manifestaron a las afueras de la Superintendencia de Medio Ambiente, adonde llegaron para presentar nuevas infracciones por parte de la empresa AES Gener, las que se suman a las doce ya cursadas por daño a los glaciares y contaminación de las aguas, entre otros temas.
Los manifestantes se definen como “visitantes frecuentes de la Superintendencia del Medioambiente (SMA)”, ya que este lunes se volvieron a presentar para denunciar cinco nuevas irregularidades del proyecto hidroeléctrico Alto Maipo de Aes Gener y el grupo Luksic.
En la oportunidad, vecinos y vecinas rechazaron el permanente comportamiento irregular y la falta a las obligaciones y compromisos establecidos en la Resolución de Calificación Ambiental (RCA) del proyecto, exigiendo la revocación del permiso ambiental.
Además, exigieron medidas concretas por parte del organismo, ante lo que consideran una extremada permisividad y falta de acción en la materia, tal como indicó el vocero de la Red Metropolitana No a Alto Maipo, Anthony Prior: “Lo hemos dicho antes y lo volvemos a repetir. Lo único que podemos asegurar en cuanto al trabajo de la SMA es que es una institución embrionaria, que está en pañales y que le falta mucho camino para alcanzar un estándar o un nivel que le permita cumplir con el rol para el cual se le ha otorgado competencia”, dijo.
El vocero añadió que han presentado, a la fecha, más de 15 denuncias y ninguna ha tenido una solución satisfactoria, incluso hay algunas que llevan más de dos años esperando respuesta.
Además, expresó que el superintendente tiene una deuda, porque hace ya un mes le dieron a conocer los estudios que demuestran contaminación en las aguas del Cajón del Maipo, realizados por el Centro Nacional del Medioambiente de la Universidad de Chile (Cenma) y corroborados por el propio Colegio Médico. Sin embargo, llevan tres semanas esperando realizar en conjunto nuevos estudios que demuestren el nivel de contaminación de las aguas, como se comprometió la SMA.
Los vecinos fueron respaldados por diversas organizaciones ambientales, para quienes una de las mayores fallas de Alto Maipo es la falta de un programa de monitoreo que debió tener el proyecto antes de iniciar la construcción del túnel que cruza los glaciares que forman el Monumento Nacional El Morado, lo que puede causar daño irreparable en los glaciares y puede afectar el abastecimiento de agua potable de la región Metropolitana.
En ese sentido, Lucio Cuenca, director del Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales (OLCA) sostuvo que con esto se demuestra que hay una ciudadanía que está cumpliendo un rol incluso más activo que el Estado sobre el seguimiento y fiscalización del proyecto y demostrando que el proyecto “es monstruoso para el Cajón del Maipo y toda la cuenca del río” y “no debió haber sido aprobado porque es inviable”.