La tarde de este lunes, el presidente Sebastián Piñera se reunió con el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, y del Trabajo, Nicolás Monckeberg, para afinar los últimos detalles de la reforma previsional que será dada a conocer a fines de septiembre.
La iniciativa gubernamental es uno de los pilares estructurales del actual ejecutivo y buscaría aumentar la cotización, crear un seguro para cubrir lagunas previsionales, e incentivar a los trabajadores que quieran retrasar su edad de jubilación con retiros parciales de fondos.
Para la ministra vocera de Gobierno, Cecilia Pérez, el proyecto está enfocado en directo beneficio a la clase media y a las mujeres.
“Promover una reforma de pensiones que apunte a mejorar las pensiones de nuestros adultos mayores y también bien focalizadas las pensiones de nuestra clase media, vale decir, particularmente, de las mujeres”.
Por su parte, el diputado y presidente de Renovación Nacional, Mario Desbordes, dijo que la iniciativa de La Moneda obedece a la urgencia de mejorar las pensiones de todos, en ese sentido, afirmó que es una tarea prioritaria para el ejecutivo y la oficialidad legislativa.
“Hay un compromiso interno de que este proyecto se ingresa dentro del mes de septiembre, esperamos que sea un proyecto que se analice en su mérito, creo que es urgente mejorar las pensiones para todos, para los que ya están pensionados, para los que están próximos a pensionarse y mejorar también el horizonte de las personas a las que les quedan varios años para jubilarse. Es un proyecto que el presidente Piñera anunció mucho durante la campaña, y, por lo tanto, para nosotros, es una tarea fundamental, prioritaria, sacar adelante”.
Pese a los buenos augurios del Gobierno y Chile Vamos, en la oposición han dado a entender que no apoyarán el proyecto si es que este no modifica la actual estructura de las AFP. Para el senador socialista y miembro de la Comisión de Trabajo de la Cámara Alta, Juan Pablo Letelier, la reforma previsional de Sebastián Piñera es solo maquillaje”.
“Creo que no es más que aumentar ahorros con el mismo esquema vigente de las AFP con algún maquillaje. Si se quiere decir que el aumento al aporte de los empleadores es una reforma, sin duda lo es, pero no hay un cambio estructural a lo que es el sistema privado de pensiones”.
La senadora DC Carolina Goic, también criticó la iniciativa ejecutiva, indicando que haciendo más de lo mismo no se mejorarán las pensiones en el país, por lo que espera una propuesta distinta hasta la ahora esbozada.
Por ahora, las críticas apuntan directamente a que el 4 por ciento adicional que aportarán los empleadores vayan a las AFP, como pretende el Gobierno.
Las conclusiones a las que llegaron el presidente junto a sus ministros y asesores serán anunciadas las próximas semanas. Desde ya, se espera un arduo trabajo prelegislativo para que la propuesta sea aprobada en el Congreso.