Este lunes, la Universidad de Chile entregó al Parlamento su diagnóstico respecto del Archivo Histórico del Senado, trabajo que comenzó en 2017 cuando ambas instituciones suscribieron un convenio con el propósito de inventariar los registros, crear un catálogo, elaborar fichas, restaurar las materialidades y digitalizar los documentos.
La investigación fue liderada por el Archivo Central Andrés Bello y se extendió por dos años, concluyendo en agosto de 2019.
Ante ello, el rector de la Universidad de Chile, Ennio Vivaldi, valoró las conclusiones del estudio, indicando que su aporte es fundamental para el conocimiento de nuestra historia, así como para la creación de identidad.
Durante la investigación se analizaron, principalmente, los documentos del siglo XIX. En ese camino se encontraron cartas escritas por los ciudadanos durante los primeros años de la República, versiones manuscritas de los procesos constituyentes y la presentación del primer proyecto de instrucción primaria, entre otros.
Alejandra Araya, directora del Archivo Central Andrés Bello, manifestó que los documentos analizados son un reflejo de la historia de nuestro país.
“Hemos destacado todos aquellos materiales que implican el accionar de la ciudadanía antes sus senadores, pero el archivo mismo, en su totalidad, es un patrimonio nacional. No hay cosas más importantes o menos importantes, sino que este nuevo poder de la República en sí mismo puede tener su memoria a través de un material que se suponía que no existía”, comentó la investigadora, quien añadió que los documentos brindan una nueva oportunidad para historiadores y público general.
Durante la actividad también participaron los senadores Jaime Quintana y Alfonso de Urresti, quienes se comprometieron a abrir el archivo a la ciudadanía.