Una de las consignas más escuchadas durante las últimas manifestaciones en Chile ha sido aquella que pide una nueva Constitución. Tanto es así, que incluso políticas de Chile Vamos se han abierto a la posibilidad de redactar una nueva Carta Magna.
Para aquello, desde muchos sectores han propuesto una asamblea constituyente, sin embargo, si bien parte de la derecha ha expresado estar dispuesto a debatirlo, no niegan sus disgusto con la idea.
Uno de ellos es el diputado UDI y jefe de bancada de dicha colectividad Javier Macaya, quien, en conversación con Radio y Diario Universidad de Chile, sostuvo que los chilenos demandan medidas sociales más que medidas políticas.
“Me cuesta identificar en la arquitectura constitucional cuál es la gran crítica, porque acá es bien inorgánico el cómo se han planteado, o sea, yo no tengo ninguna duda que hay un montón de chilenos que se movilizaron por distintas demandas sociales, por indignación, porque no les alcanza para llegar a fin de mes, de hecho esto partió por un tema económico en torno al Metro y explotó en otras aristas. Obviamente dentro de esas aristas está el tema del proceso constituyente, yo no niego que sea parte de las discusiones que vamos a tener que dar, ahora yo claramente me pongo -y así lo hemos hecho como partido- de un lado de la agenda más enfocada en lo social que en lo político”.
Al respecto, criticó a la izquierda por querer “apropiarse” de las demandas ciudadanas y recordó que la Constitución impuesta durante la dictadura de Pinochet ya ha tenido algunas modificaciones.
“Es súper útil recordar que nuestra Constitución desde el año 1980 a la fecha ha sufrido modificaciones absolutamente importantes (…) yo creo que hay una discusión, una agenda, un proyecto de ley que se ha presentado en esa linea, pero el camino no puede significar que cada uno lleva harina a lo que uno piensa en esta materia”.
En ese sentido, Macaya apeló al camino institucional, camino que, según él, quiere saltarse la izquierda y, en especial, el Partido Comunista.
“Yo creo que este es un camino que debe ser institucional (…) acá hay personas que no creen mucho en el camino institucional, yo lo digo como una crítica a parlamentarios de izquierda y especialmente al Partido Comunista, que asumen que la manera de canalizar todo el descontento social es que la agenda coincida con lo que ellos están pensando, que la agenda propia que ellos han levantado sea exacta, y si no se aplica ese modelo, dicen que entonces no hay ninguna movilización que hacer”.
“El diálogo hoy está sujeto a la agenda de ellos, en lo que ellos piensan, y eso me parece injusto en términos de respeto a la democracia que se expresó hace dos años atrás y eligió un programa de Gobierno y un presidente por amplia mayoría”, continuó.
El parlamentario gremialista también afirmó que la crisis que actualmente enfrenta Chile es propia de los países desarrollados, en ese sentido la comparó con situaciones similares en Europa y las diferenció de crisis que han tenido países de la región, como Ecuador y Venezuela.
“Este movimiento social no lleva todavía diez días, no está articulado, no tiene vocero identificado, es algo absolutamente atípico de lo que habíamos vivido en el pasado (…) esta es una crisis de países desarrollados o que están en vías de desarrollo, que hay una clase media que exige más, que exige ser parte de de los beneficios del desarrollo económico, que se cansó de los privilegios, que se cansó de los abusos, creo que esta es una crisis más parecida a lo que vivió Francia hace un año atrás, a lo que está viviendo Cataluña hoy, y diferente a lo que vive Ecuador y lo que vive Venezuela”.
Además criticó a parlamentarios del Frente Amplio y el Partido Comunista por apoyar públicamente las evasiones al Metro, situación que hizo explotar el descontento social. Para Javier Macaya es paradójico que parlamentarios avalen la desobediencia civil, pues su rol es justamente hacer leyes para que se cumplan.