En un nuevo intento por tomar el control de la agenda, el presidente Sebastián Piñera utilizó la solemne figura de la cadena nacional para anunciar una serie de medidas bajo el título “Agenda Anti Abusos”.
“Quiero compartir con ustedes una Agenda para combatir los abusos y asegurar un trato digno y justo a todos los chilenos. Porque las chilenas y chilenos hemos expresado, en forma fuerte y clara, nuestra voluntad y compromiso de construir un Chile más justo, con menos desigualdades, mayor movilidad social y mayor igualdad de oportunidades”, afirmó el mandatario.
Esta es, además, una de las pocas oportunidades desde el 18 de octubre en que el presidente puso énfasis en temas tendientes a corregir las desigualdades y no en la llamada agenda de seguridad ciudadana.
Así, el paquete dado a conocer se basa en tres pilares fundamentales: colusión y delitos tributarios, derechos de los consumidores, y derechos de los trabajadores.
Debido a que aún queda en el imaginario colectivo el impacto de los últimos casos de colusión y abusos en mercados altamente concentrados, como el de los medicamentos y el papel higiénico, el Mandatario dio a conocer una serie medidas con el fin de “evitar que estas situaciones se repitan”. Así, el Presidente anunció que se fortalecerá la Fiscalía Nacional Económica, con nuevas herramientas como el alzamiento del secreto bancario y la protección de las pruebas físicas o digitales de conductas anticompetitivas.
También habrá un aumento de las penas de cárcel las las sanciones con penas de cárcel efectiva para los delitos de colusión, cuando los bienes afectados sean de primera necesidad, como medicamentos o alimentos. En tanto, se aumentarán las sanciones penales y las multas para los delitos tributarios, el uso de información privilegiada y la divulgación de información falsa en los mercados financieros.
Respecto al ítem referido a “los derechos de los trabajadores”, el Presidente afirmó que próximamente darán a conocer una agenda que incluye la modernización de la Dirección del Trabajo, junto con “la incorporación de tecnología digital para facilitar la relación entre los trabajadores, los empleadores y la Dirección del Trabajo y la promoción de la mediación voluntaria entre trabajadores y empleadores por parte de la Dirección del Trabajo, para facilitar acuerdos y soluciones de conflictos”.