En un comunicado, la Agencia de la ONU para los refugiados (Acnur) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) “piden a Malta y a los demás estados europeos que intensifiquen sus esfuerzos para permitir que los cerca de 160 refugiados y migrantes socorridos, actualmente en el mar a bordo de dos navíos de [la compañía de cruceros] Captain Morgan sean puestos en seguridad en tierra firme”.
Los migrantes, en su mayoría procedentes de Libia, un país en guerra, tienen que ser acogidos por Malta pero los otros países de la UE tienen que ser “solidarios” y aceptar en su territorio una parte de ellos.
Por eso las agencias de la ONU consideran que se necesita urgentemente un sistema de relocalización negociado y aceptado por todos los países “para poder salir del ciclo perpetuo de negociaciones y de arreglos ad hoc que ponen en peligro la vida y la salud de las personas”.