Esta vez no habrá desfile de automóviles y guardaespaldas, ni ceremonia de apertura. La reunión de dos días de los países más ricos del mundo se celebrará bajo las reglas de la nueva normalidad.
La epidemia del coronavirus dominará entonces la forma y el contenido: las sesiones serán cortas y en línea, y el tema principal de los intercambios presididos por el rey Salmán será la epidemia mundial.
En particular estarán en la agenda la distribución de las vacunas tras los últimos ensayos clínicos esperanzadores y la respuesta a los llamamientos para que el G20 amplíe su financiamiento para luchar contra el virus, que ha infectado a más de 55 millones de personas y provocado la muerte de más de 1,3 millones en todo el mundo.
Se esperan, entre otros, discursos de la canciller alemana, Angela Merkel; del presidente chino, Xi Jinping; y de su homólogo ruso, Vladimir Putin, indicaron fuentes cercanas a la organización.
El presidente Donald Trump “participará” en la cumbre en línea, según indicó un responsable estadounidense. Su secretario de Estado, Mike Pompeo, estará en Arabia Saudita para la cita.
Cooperación internacional
El grupo de los 20 países más ricos del planeta ha sido duramente criticado por la falta de consenso para dar una respuesta coordinada a la pandemia. En ese sentido, esta cumbre digital “tratará de fortalecer la cooperación internacional para apoyar la recuperación económica mundial”, dijo el ministro de Finanzas saudí Mohammed al-Jadaan.
Los países del G20 han destinado más de 21.000 millones de dólares (17.700 millones de euros) para combatir el coronavirus. También se movilizaron unos 11 billones de dólares para salvar la economía mundial, según los organizadores.
Sin embargo, varios países instan a contribuir financieramente con la Organización Mundial de la Salud (OMS), institución que precisa de 4.500 millones de euros para su fondo especial destinad a distribuir vacunas contra el coronavirus, entre otras cosas.
Argentina pide apoyo
La cumbre abordará así mismo la deuda de los países más pobres. De su lado, Argentina a través de su ministro de Economía, Martín Guzmán, solicitó el viernes una reunión virtual para discutir un “apoyo” del grupo en la negociación de Argentina con el Fondo Monetario Internacional.
Argentina debe devolver al FMI casi 53 mil millones de dólares hasta 2024, una cifra colosal, la más grande de América Latina.
