En conversación con la primera edición de Radioanálisis, la nueva presidente del Senado, la demócrata cristiana, Yasna Provoste, se refirió a su llegada a la mesa de la Cámara Alta y también del sello que busca imprimir en su rol como segunda autoridad del Estado.
Respecto de las críticas que recibió por parte de senadores oficialistas, la senadora afirmó que “no me deja de llamar la atención, pero creo que tiene que ver la incapacidad de darse cuenta de la realidad que ha vivido el país. Efectivamente antaño las personas que asumían un cargo como este dejaban de decir lo que pensaban, pero yo creo que eso es parte del pasado, porque si tenemos un problema de legitimidad en las instituciones, en parte importante es porque la ciudadanía siente que las autoridades no son lo suficientemente sinceras”.
En esa línea, la representante de la región de Atacama agregó que “yo me pregunto si alguien se puede extrañar porque yo diga que soy de oposición. Algunos dicen que les molesta el tono, bueno, he tenido siempre este tono. No porque hoy asuma una responsabilidad en la presidencia del Senado una tiene que fingir algo que no es”.
La nueva presidenta del Senado se refirió además a la crítica que realizó al gobierno por las reiteradas violaciones a los Derechos Humanos que se han cometido en el país. Al respecto Yasna Provoste recalcó que “hemos visto, conmovidos, estas graves y generalizadas violaciones a los Derechos Humanos y quienes no se han visto conmovidos son aquellos que a lo mejor les molesta esta realidad. Yo creo que hacer un llamado desde la testera del Senado, como segunda autoridad del país, es algo importante para poder terminar con lo que ya tanto sufrimiento ha generado en nuestro país”.
Respecto de la agenda legislativa en el último año de gobierno de Sebastián Piñera, con temas tan polémicos en agenda como el TPP-11, la nueva presidenta del Senado hizo un llamado al Palacio de La Moneda “uno esperaría que el gobierno no forzara discusiones que dividan a los chilenos, sobre todo en materias que dentro de unos meses van a ser parte del corazón de la Convención Constitucional. Pero también debe existir el compromiso de que exista una oposición clara para actuar unida en defensa de los intereses de las mayorías”.
Acerca del debate en específico del TPP-11, la senadora DC afirmó que “insisto, espero que el gobierno no insista en forzar discusiones que nos dividen, sobre todo en estas materias donde existe una disposición mayoritaria que no está a favor de la suscripción de este pacto. Pero bueno, también hemos señalado que mientras estemos en esta responsabilidad respetaremos la Constitución que actualmente nos rige y en esta Constitución el gobierno tiene la facultad de establecer urgencias a tramitaciones de proyectos y, sin duda, ejercerá esa facultad”.
Respecto de la unidad que se requiere de la oposición en este periodo, la senadora Provoste recalcó que “desde 2018 que en el Senado ha existido una disposición muy importante de unidad de las fuerzas opositoras (…) Esperamos que esta unidad se siga fortaleciendo y además, no es solo ésta unidad al interior del Parlamento, sino que también con las fuerzas opositoras y la sociedad civil que quiere transformaciones importantes y que requiere que el Senado acompañe estas causas”.
Finalmente, acerca del rol que debe jugar el Senado durante el trabajo de la Convención Constitucional, la presidenta de la Cámara Alta señaló que “lo que nosotros hemos comprometido en nuestra gestión es facilitar el trabajo de quienes van a tener esa responsabilidad. Mantener una relación institucional entendiendo que la responsabilidad que ellos tienen es distinta a la nuestra. Es muy relevante que desde el Congreso en su conjunto seamos capaces de realzar la labor que la ciudadanía le asigna a esta Convención”.