Un parlamentario británico muere este viernes apuñalado por un fanático cerca de Londres. Ayer, cinco personas perdieron la vida atravesadas por flechas lanzadas por un extremista en Noruega, mientras dos más quedaban gravemente heridas. Y en Francia se rinde homenaje al profesor que hace un año fue decapitado por un yihadista checheno. En tanto en Afganistán, a sólo una semana de un atentado suicida que dejó 70 muertos, este viernes otras 32 personas fallecieron -muchas mutiladas- por otro kamikaze que se hizo estallar también dentro de una mezquita chiíta, en medio del rezo musulmán de los viernes. ¿Qué guía esas conductas? La única respuesta es odio. Odio a la intolerancia de un sistema, odio a la imposición de unas ideas y de una cultura sobre otra, odio a un modo de vida que no se desea. Odio a ser sometidos por la fuerza de una potencia extranjera en suelo propio. Y ya sabemos que el odio sólo engendra más odio.

El diputado conservador, David Amess, murió este viernes como consecuencia de las múltiples cuchilladas que le propinó un individuo de 25 años cuando conversaba con  vecinos de su circunscripción electoral en el condado de Essex, al este de Londres. El crimen ha causado conmoción en Gran Bretaña, especialmente en círculos políticos,  tanto por la personalidad de Amess como por la creciente frecuencia de estos ataques.

El miembro de la Cámara de los Comunes tenía 69 años y había sido parlamentario durante cuatro décadas. Católico, partidario del ‘brexit’ y de la pena de muerte, contrario al aborto y a la caza del zorro, Amess publicitaba sus reuniones públicas. De hecho, en su página web anunciaba a qué hora y en qué lugar recibiría a los vecinos de su distrito electoral. No sabía que su última cita sería este viernes en la iglesia metodista de Belfairs, en medio de un barrio residencial. A las 12:05 un hombre se incorporó, avanzó hacia el legislador y le acuchilló múltiples veces en presencia de los numerosos y horrorizados  testigos. La Policía ha informado que el presunto asesino, de 25 años, fue detenido y dijo creer que el crimen fue obro de un solo  individuo y no de una conspiración grupal.

En Noruega, en tanto, la justicia dictaba prisión preventiva para el autor de un ataque con arco y flechas ayer, en el que murieron cinco personas y tres más fueron heridas en Kongsberg, hecho de sangre que podría tener motivación terrorista. Espen A.B., de 37 años, un converso al islam radicalizado, deberá permanecer en aislamiento y no compareció este viernes a la vista en el juzgado de Buskerud pues fue transferido a un servicio de salud para ser sometido a exámenes psiquiátricos, informó la Fiscalía. La policía, por su parte, confirmó que el individuo estaba bajo vigilancia de los servicios de inteligencia noruegos, que creen que el crimen apunta a un atentado terrorista.

Espen A.B posee nacionalidad danesa -por su madre- habiendo nacido y residido casi toda su vida en Buskerud, un municipio de 28.000 habitantes al suroeste de Oslo. Ya había sido condenado en 2012 a 60 días de prisión condicional por robo y posesión de drogas. Ocho años más tarde, en julio de 2020, un tribunal le prohibió acercarse a su familia en Kongsberg por haber amenazado de muerte a su propio padre con una pistola. Medios noruegos han difundido un video suyo de 2017 en el que lanza amenazas en noruego y en inglés, confirmando su condición de musulmán. Por tal razón, un conocido suyo advirtió a las autoridades al respecto.

En tanto, en Francia, hoy se rendían múltiples tributos al profesor de historia y geografía Samuel Paty que hace un año fue decapitado por un yihadista. La ceremonia principal se efectuará en el colegio Bois d’Aulne, en la localidad de Conflans-Sainte-Honorine, en la periferia de Paris, donde Paty enseñaba. Como un ejemplo de tolerancia, a esta ceremonia asistirán los imanes de la Gran Mezquita de París. Mañana sábado, los familiares de Samuel Paty se reunirán con el presidente Emmanuel Macron y el Primer Ministro Jean Castex en el Palacio del Elíseo. Además, también mañana se develará una placa en la entrada del Ministerio de Educación que “siempre rendirá homenaje a Samuel Paty”, según dijo el ministro de Educación galo, Jean-Michel Blanquer. Y frente a la Universidad de la Sorbona será inaugurada la Plaza Samuel Paty en una ceremonia que presidirá la alcaldesa de París, la socialista Anne Hidalgo.

Paty fue cruelmente asesinado debido a una implacable campaña en su contra a través de las redes sociales, luego de enseñar caricaturas del profeta Mahoma en una clase sobre laicismo y libertad de expresión. El crimen tuvo lugar precisamente durante el juicio a los extremistas que cometieron el atentado contra la revista ‘Charlie Hebdo’ en 2015, situación que de inmediato revivió el fantasma del terrorismo en Francia. El autor del atroz crimen fue Abdullakh Anzorov, un refugiado checheno de 18 años, capturado por la policía poco tiempo después. Además, una quincena de personas están siendo investigadas judicialmente por colaborar, en distintos grados, con el asesinato, entre ellos el padre de una alumna y un militante islamista.

(Imagen: Miembros de los talibanes montan guardia cerca de una mezquita chiita de Kandahar tras el atentado, el 15 de octubre de 2021. Javed Tanveer AFP – RFI)