Cuatro décadas de militancia llevaba el ex parlamentario y hoy gobernador de la Región de los Lagos, Patricio Vallespín, en la Democracia Cristiana. Sin embargo, los problemas internos y la poca claridad política frente al escenario abierto después del estallido social y el proceso constituyente que terminó con el triunfo del Rechazo el 4 de septiembre, lo llevaron a sumarse a la ya larga lista de militantes que han dejado la colectividad de Renán Fuentealba, Eduardo Frei Ruiz Tagle y Bernardo Leighton.
“Sentí que había una lucha interna para ver el que se queda y el que se va, una especie de Highlander, aquí se corta la cabeza y el que queda, queda y el otro adiós. Esa actitud tan cerrada de decir que algunos sobran me pareció inadecuada”, comentó Vallespín en entrevista con la primera edición de Radioanálisis de Radio Universidad de Chile.
En conversación con los periodistas Juanita Rojas y Claudio Medrano, el gobernador indicó que a diferencia de lo que hoy ocurre al interior de la DC, “a mí siempre me gusta convocar a cosas, sumar y no estar pensando cómo se resta a otros. Por lo tanto, me pareció que ese es un punto de quiebre fundamental y también la poca capacidad de adaptarse, de ver los nuevos temas, de cómo abordarlos, de cómo renovar una agenda en la que muchas veces no hay una posición única y a veces ni siquiera hay una posición”.
Consultado si su nuevo domicilio político estará junto a los recién renunciados senadores Ximena Rincón y Patricio Walker, Vallespín indicó que si bien existe una amistad con ambos legisladores, su posición está más bien cercana a los conceptos de la socialdemocracia.
Por eso señaló que a su juicio espera sumarse a un proyecto “más amplio que lo que quizás puedan convocar. En algún minuto quizás confluiremos en temas país”, precisó.
En ese sentido agregó que la idea es “ir construyendo una mirada más amplia en conversaciones con diputados como Vlado Mirosevic, Alejandro Bernales, personas como Tito Ulloa que están llegando recién al Congreso, mismos diputados de la Democracia Cristiana que de alguna u otra manera sienten que hay que tener una mirada más amplia, son algunos de los pasos, algunos de los nombres”.
Vallespín sostuvo que espera que su ahora ex colectividad pueda superar los problemas que hoy enfrenta y sumarse de esta forma a un referente que busque en conjunto soluciones a los desafíos que tiene Chile.
“Probablemente si la Democracia Cristiana resuelve esos temas, podrán ellos participar en este nuevo referente que yo hablo que tiene que ser mucho más amplio de partidos, movimientos que se suman”, subrayó.
Vallespín valoró otras experiencias que han mostrado al menos hacia la opinión pública una unidad de acción para proponer soluciones al país. “El Frente Amplio tiene muchas colectividades, muchas líneas de pensamiento, pero se aglutinan en algo central que les une y algo así es lo que yo creo que hay que construir”.
Acerca de los problemas que llevaron a esta situación a la DC, la autoridad regional de Los Lagos puntualizó que pasó por no descifrar correctamente el reclamo de la gente, lo que finalmente los llevó a un magro resultado electoral en las parlamentarias y también en la elección para la Convención Constituyente donde eligieron un solo representante.
Por lo mismo, dijo que es importante recoger “este llamado que la gente hace de cómo hacemos más integración, pero transformaciones con moderación, con gradualidad, donde usted se compromete a interactuar con todos para llegar a las mejores salidas y no imponer una cosa sobre otra, porque yo creo que eso cansó a la gente”.
Vallespín subrayó que “esto es un llamado a que los humanistas se unan, no a que se sigan dividiendo para ver de verdad cómo se hacen cambios con moderación. El país necesita aquello. Yo celebro que muchos estén en ese espíritu dialogante”.