A pesar de los avances que el mundo ha conseguido en temas de conectividad y comunicación,
acceder a servicios de salud aún representa un desafío para algunos grupos de la población, como
los ancianos, personas pobres o que viven en zonas rurales. Las plataformas de salud digital, que
vieron ampliado su uso con la pandemia por Covid-19, han permitido que los proveedores de salud
proporcionen atención y tratamientos, facilitando cada vez más su acceso a la población.
Hoy, el acceso digital universal a la atención médica inclusiva es parte de la visión del G20 para
lograr el Objetivo de Desarrollo Sostenible 3 (buena salud y bienestar), pero presenta desafíos al
no existir un marco unificado o esfuerzo concertado que entregue una hoja de ruta a los países
para lograrlo.
La académica del Departamento de Control de Gestión y Sistemas de Información de la FEN U. de
Chile e investigadora del Núcleo Milenio para Mejorar la Salud Mental de Adolescentes y Jóvenes
(Imhay), Alicia Núñez; la directora de Imhay, Vania Martínez; el académico del Department of
Information and Decision Sciences, University of Illinois at Chicago, Arkalgud Ramaprasad; y SD
Sreeganga, estudiante de Ph.D., en O.P. Jindal Global University, elaboraron el documento
denominado Pathways to Universal Digital Access to Inclusive Healthcare in the G20, que entrega
un conjunto de políticas que buscan integrar las capacidades e infraestructura de atención médica
digital, para un acceso asequible, equitativo y universal. Estas se basan en un marco ontológico de
acceso digital universal a la atención médica inclusiva, que permita formalizar y transferir
conocimientos; generar retroalimentación y aprendizajes de su implementación para los países
dentro y fuera del G20; y mapear el estado de necesidad y práctica del acceso digital.
La académica Alicia Núñez sostiene que este trabajo surgió a partir de “que la atención médica
digital está sucediendo hoy en día y está cambiando la forma en que se realizaban las atenciones
de salud. Por lo tanto, es necesario integrarlas en la vida diaria y aprender de los esfuerzos de
desarrollo e integración que han realizado diversos países”.
Añadió que es importante “contar con una hoja de ruta o guía que nos permita lograr que este
tipo de atenciones digitales sean equitativas, para así lograr un acceso universal. En este resumen
de recomendaciones de políticas de salud proporcionamos un marco claro, conciso y completo
para promover un acceso digital universal a una atención médica inclusiva digital”.
Recomendaciones
Las recomendaciones entregadas por los autores al G20 se ordenan de acuerdo con el marco
ontológico y están alineadas con investigaciones, políticas, y recomendaciones de la OMS, las
agencias de la ONU, experiencias del equipo de trabajo y otros organismos. Su priorización se
establece en base a las necesidades de cada país.
-Salud digital: Las prioridades políticas de salud digital deben estar alineadas, adaptadas y moldear
las preferencias de salud de cada país. El acceso digital debe diferenciar e integrar los
requerimientos de la salud física, mental y atención médica holística; y soportar los requisitos de
las diferentes etapas de atención, que incluye los avances en el conocimiento médico, la
demografía, los requerimientos de la población y las políticas de salud, desde la preconcepción
hasta la muerte.
La atención médica digital debe estar integrada, centrada en las personas, ser interoperable y con
alta fidelidad. También, debería ayudar a generar datos para determinar las intervenciones más
efectivas y eficientes; terminar con el trabajo pesado y repetitivo, eliminar el papeleo, ayudar a
tomar mejores decisiones, entre otros. La gobernanza de la salud digital debe estar alineada con la
estructura de gobernanza de salud del país y sus requisitos legales.
-Acceso a la atención médica digital: El acceso digital es necesario, pero no suficiente para una
asistencia de salud eficaz y eficiente. Debe ir de la mano con el acceso físico (en persona), y
equilibrarse en función de los requisitos de atención médica, el personal y la población.
El acceso digital debe abordar los nuevos desafíos de comunicación, cumplimiento, adherencia,
motivación y comportamiento; asimismo, deben transformar la escala y el alcance de la atención
médica, aprovechando la digitalización, y no solo satisfacer los requisitos actuales y automatizar la
entrega de servicios de salud actual. Debe ser equitativo y reducir las disparidades en la atención
médica.
-Personal que entrega atención médica digital: El acceso digital debe estar disponible para todos
los proveedores de atención médica en función de su labor, requisitos y la necesidad que
satisfacen. Deben ayudar a automatizar, informar, y transformar su papel en la prestación de
atención médica.
El acceso digital para la atención médica de una persona debe ser transferible entre proveedores;
ofrecer programas específicos de enfermedades y atención centrada en el paciente; ser confiable,
privado, confidencial y seguro; respaldar e integrar las funciones de atención médica especializada
de los proveedores; y estar incluido en el plan de estudios, su formación y competencias.
-Población receptora de asistencia médica digital: El acceso digital debe estar disponible para
toda la población en función de sus requerimientos, necesidades, ubicación y recursos y ser
mapeados en detalle.
Las personas deben ser socias en el diseño, desarrollo y entrega del acceso digital a la salud. Sus
sensibilidades culturales deben ser parte del proceso.
Los datos agregados deben ponerse a disposición de los investigadores y los encargados de
formular políticas, para evaluar la eficacia de los programas y las intervenciones.
-Fuerzas que mueven la salud digital: Las políticas de acceso digital a la salud deben establecer
normas, ayudar a superar las barreras de acceso y los impulsores, como la educación, los
incentivos y la flexibilidad operativa. Las políticas de gobernanza, legales y regulatorias deben
establecer normas para el acceso digital a la atención médica. La ética de la prestación y recepción
de asistencia sanitaria digital debe normalizarse y desplegar recursos para cumplir las normas de gobernanza, legales, reglamentarias y éticas, incluso a costa de introducir barreras o disminuir los
impulsores de salud.
Se deben implementar recursos para superar las barreras al acceso digital a la atención médica,
como la calidad de la conexión, las actualizaciones frecuentes de los sistemas operativos y las
plataformas y la fatiga del personal.
-Recursos digitales: Los recursos tecnológicos y financieros son necesarios, pero no suficientes.
Los recursos tecnológicos deben ser accesibles para el personal y la población; estar disponibles en
todas las etapas y enfoques de la atención de la salud, y cumplir con los requisitos de calidad de
los usuarios. Los recursos financieros sustentan la disponibilidad, accesibilidad y calidad de todos
los recursos y del sistema. También, deben garantizar su continuidad en todas las ubicaciones y
tiempo, las dos ventajas claves del acceso digital sobre el acceso físico.
Los recursos humanos deben diseñar, desarrollar y operar el sistema de manera efectiva y
eficiente; y soportar las funciones de la tecnología para el personal y la población. Los recursos
informativos deben informar y transformar el acceso digital universal a la atención médica
universal. La información debe incluir la población, el personal; y proporcionar soporte para
transacciones, decisiones, interpretación y desarrollo del conocimiento.
Los recursos espaciales deben estar disponibles y accesibles, para el personal y los destinatarios, y
así mantener la confidencialidad, privacidad y seguridad de su interacción. Los recursos de
infraestructura son recursos físicos no tecnológicos, como edificios, plomería, administración y
otros, que apoyan al personal y población. Los recursos temporales ayudan a igualar la
disponibilidad y accesibilidad del personal sanitario y destinatarios. También, aseguran la provisión
de servicios de atención médica de emergencia episódicos, y los servicios continuos.
-Acceso digital universal a la atención médica inclusiva: El éxito en proporcionar acceso digital
universal a la atención médica inclusiva dependerá de su gobernanza a nivel local, nacional y
global. Además de formular políticas, la gobernanza debe incluir la misión de generar
conocimiento y aplicarlo a través de la investigación formal y la evaluación de políticas y prácticas.
Debe estar alineado e integrado con la misión de salud digital del país y utilizar el ecosistema
creado por dicha misión de manera efectiva. Cada país, debe desarrollar un sistema de aprendizaje
continuo con retroalimentación, para guiar la trayectoria del acceso digital universal a la atención
médica inclusiva.