En las últimas dos semanas, había cierto optimismo sobre un acuerdo. Ahora, ambas partes se culpan mutuamente del estancamiento. Las negociaciones continúan en Catar, pero sin la presencia de una delegación israelí.
El ataque fue reivindicado por los grupos rebeldes yemeníes, quienes justificaron su agresión como una respuesta a “las masacres de (sus) hermanos y hermanas” palestinos. Además, advirtieron que afrontarán cualquier escalada israelí-estadounidense.
El portavoz del grupo hutí señaó que, entre los ataque, 203 ataques fueron aéreos, incluidos 86 ataques durante la semana pasada.
Más de 2 mil barcos han tenido que desviarse miles de millas para evitar el mar Rojo rodeando el continente africano, algo que puede causar graves pérdidas a los grandes consorcios transnacionales del comercio marítimo.
El portavoz de operaciones militares, Yahya Sari, afirmó que “el enemigo estadounidense-británico ha lanzado una brutal agresión en el contexto de su apoyo a la continuación de los crímenes israelíes en Gaza”.