Por más de 50 años, la denominada Fundición Hernán Videla Lira ha perjudicado gravemente la vida de los residentes de la comuna distante a 19 kilómetros de Copiapó. Después de un nuevo episodio de emanación tóxica, el INDH y vecinos intentan, a través de recursos judiciales, paralizar las faenas de la planta.
La información preliminar apunta a que más de 30 personas, en su mayoría niños y adolescentes, debieron ser atendidos de urgencia por presentar síntomas de intoxicación.
Debido a la cantidad de gases liberados en la zona, se declaró alerta amarilla. Los cinco trabajadores prestan servicios en las empresas Gasmar y Oxiquim y se encuentran internados en el Hospital de Quintero.
A solo 48 horas del episodio que dejó más de 50 menores de edad intoxicados, la comuna registró un nuevo episodio del que ya se están evaluando los gases contaminantes y su posible origen.
Más de 30 alumnos presentaron malestares físicos debido a la emanación de un gas desconocido, por lo que las autoridades activaron todos los protocolos correspondientes y se suspendieron las clases en todos los establecimientos de la comuna.