La reforma de las pensiones fue la promesa de campaña del Presidente Emmanuel Macron. El objetivo anunciado era simplificar el sistema actual y eliminar las desigualdades que genera. Sin embargo, este jueves se realizará, en toda Francia, una fuerte movilización contra esta reforma.
Ante unos 200 legisladores de su partido, el presidente francés afirmó que “la burguesía no tiene ningún problema” con la inmigración porque no “se la cruza”, a diferencia de “las clases trabajadoras”, que “han emigrado a la extrema derecha”.
La primera en reaccionar fue la canciller alemana Angela Merkel quien apoyó la idea de crear un ejército de y luego vino la solidaridad inesperada de la izquierda francesa hacia Macron.
Twitter ha sido nuevamente el medio utilizado para que Donald Trump lance sus ataques. Esta vez el blanco fue Emmanuel Macron y las burlas se extendieron a todos los dominios, desde su baja popularidad, pasando por la tasa de desempleo o la historia francesa.