En conversación con Radio Universidad de Chile, el diputado de Evópoli, Felipe Kast se refirió a la situación de la Alianza por Chile.

Uno de los temas abordados por el parlamentario por Santiago Centro fue la revisión de principios de la UDI y la mirada revisionista que el sector está teniendo sobre la dictadura.

“Me parece muy sano. Ya lo hizo Lavín, Chadwick, Hernán Larraín. Yo no soy la UDI, pero me alegra que tengan su reflexión. Creo que hoy es un patrimonio de todos los chilenos poder decir nunca más a una violación a los derechos humanos”.

“Lo que me llama la atención es que las nuevas generaciones de la izquierda no hagan lo mismo con lo que sucede en otras partes. Cuando Karol Cariola (PC) dice que en Cuba no hay una dictadura la invitaría a conversar con otros cubanos, no con los que la pasan bien”.

Kast afirmó que “yo creo que Chile está para poder dar lecciones de nunca más de manera transversal. Me alegra mucho que la UDI se suba a esa micro, pero también me gustaría que los nuevos sectores de izquierda se sumaran a lo mismo. De lo contrario, vamos a seguir siempre en esta suerte de dicotomía en donde se justifica todo. Perdón, pero hay cosas que no se justifican nunca”.

En lo que respecta al legado económico y social de la dictadura, el parlamentario señaló que es necesario tener la capacidad de ver “luces y sombras” de cada época.

En lo negativo, destacó que Chile no ha estado a la altura de tener una “sociedad más justa”, pero valoró el proceso de inversión, crecimiento económico, creación de empleo en estos últimos 30 años, que “ha sido más mérito de lo privado”.

“Lo que debió haber dado el contrapeso, era un Estado más potente. (…) hay un nivel de improvisación que impide un desarrollo equilibrado”, dijo el parlamentario, exigiendo que el Estado “haga la pega”.

Sobre Evópoli, se refirió al origen de emprendedores sociales de sus militantes y a las diferencias que sostiene con otros sectores de la Alianza, como Amplitud.

El no provenir desde partidos políticos, venir desde lo independiente, es uno de los sellos del movimiento. “Vivimos una experiencia común. Ese mundo se agrupó diciendo que la política no puede seguir siendo un espacio para los mismos de siempre, hay que complementarla con nuevas visiones”, aseguró.

“Somos más liberales”, dijo refiriéndose por ejemplo, a la apertura sexual y a otras visiones discriminatorias que para ellos quedan fuera. “No es en contra de nadie, tenemos cercanías con algún mundo de la Democracia Cristiana, de Andrés Velasco, tenemos afinidades con Renovación Nacional, entonces, más que en contra de alguien, o diferenciados de alguien, somos un grupo de gente con fuerte presencia regional de Valparaíso al sur, que quiere dedicarse a la política, nada más complicado que eso”.

Agregó que “lo hacemos desde una mirada fresca. Con ganas de sumar. Claramente no nos representa el giro de la Concertación hacia el Partido Comunista. No creemos en esa mirada de la vida, tenemos una visión más de centro”, agregó.

“En la medida que se vaya dejando atrás el pasado, el ordenamiento político en base a ese elemento de la historia de Chile (Dictadura), creo que se pueden reagrupar las fuerzas. Ahora yo creo que a la Nueva Mayoría le hace muy bien tener a la DC adentro porque es sano cuando las coaliciones tienen distintas miradas”, dijo y agregó que tiene una dualidad de pensamiento sobre qué es lo que mejor para el país y no solo para la coalición en la que participa.