En la cuenta pública de la Comisión Nacional de Acreditación del 2014 uno de los temas a los que se refirió el Presidente de la CNA, Alfonso Muga, fue los requisitos del Plan Nacional Docente. Entre los requerimientos principales que traerá esta reforma será la acreditación obligatoria de los programas universitarios de pedagogía en un plazo de tres años.

Hasta enero del 2015, eran 470 los programas de pedagogía  que, voluntariamente, buscaron la aprobación de la CNA. En esa instancia 94 no lograron la acreditación. De mantener este resultado, en los próximos tres años, estas carreras no podrían seguir formando profesores. El proyecto de ley también especifica que “si la carrera o programa no obtuviera la acreditación (…), la universidad no podrá admitir nuevos estudiantes, pero deberá seguir impartiéndolas hasta la titulación o egreso de sus estudiantes matriculados.”

El presidente de la Comisión Nacional de Acreditación reconoció que esta materia ya se está trabajando con el ministerio de Educación, aunque reconoce que han priorizado “el tema de la calidad de la educación superior y el marco nacional de cualificaciones”.

“Nosotros compartimos que deben haber carreras en el país con acreditación obligatoria. Lo de pedagogía es determinante y desde luego, es importante cuidar que ingresen a pedagogía personas que tengan no solo la vocación de ser buenos profesores sino que también la capacidad y el mérito necesario como para poder llegar a estudiar la carrera.”, explicó Muga.

Dentro de las 34 universidades que poseen programas pedagógicos sin acreditación, según cifras de la CNA hasta enero del 2015, se encontraban la Universidad del Mar (con 13 programas), la Universidad Bolivariana y la Universidad Arcis (7), la Universidad SEK y la Universidad de Antofagasta (6), la Universidad Pedro de Valdivia (5), la Universidad de Academia de Humanismo Cristiano (4) y la Universidad de Los Lagos, la Universidad Los Leones y la Universidad de Chile (3). Aunque esta última posee tres carreras que se abrieron este año. A través de información institucional sumado a las palabras de Marcelo Pérez, jefe de Carrera de Educación Parvularia y Básica Inicial, se explicitó que estos programas ya se encuentran en proceso de acreditación.

Uno de los asistentes a la cuenta pública de la CNA fue el vicepresidente Ejecutivo del Consejo de Rectores, Aldo Valle, quien valoró la iniciativa del Ejecutivo, afirmando “que el país requiere avanzar a un sistema de aseguramiento de la calidad que garantice a todos los estudiantes recibir una formación que los habilite para desempeñarse profesionalmente con la mayor competencia posible.”

En tanto, el ministro de Educación, Nicolás Eyzaguirre, presentó cifras que avalan esta medida. Al año aclaró el Ministro, “ingresan a las carreras de pedagogía 17 mil 500 jóvenes, de los cuales egresan cerca de 15 mil. No obstante el sistema escolar absorbe entre 5 mil y 6 mil al año. Es decir, hay un ingreso de tres veces lo que el sistema absorbe.”

De la misma forma, Jaime Veas, declaró que “para lograr una mejor carrera docente necesitamos aumentar los criterios de selección para los futuros candidatos a ser profesores. Creemos que para tener mejores docentes en Chile es necesario tener barreras de entrada”.

Dos excepciones para la acreditación obligatoria

Desde Elige Educar también apoyaron esta medida. Joaquín Walker, coordinador de Ciudadanía y Política de la fundación que integra El Plan Maestro, destacó que “lo relacionado a la formación universitaria es lo que mejor está hecho en el proyecto de ley.”

Además, Walker subrayó que con esta iniciativa la acreditación se vuelve obligatoria para las carreras y programas de pedagogía. “Sabemos que hoy, en el papel, es obligatoria la acreditación, aunque esto lo hace definitivo al establecer una sanción: los programas que no están acreditados no podrán recibir estudiantes en los años venideros. Esta sanción es más potente que la actual que solo impide que los programas de educación reciban fondos públicos de forma directa. Aunque igual sabemos que pueden recibir de forma indirecta (…). Por eso tenemos el problema de que un 20 por ciento de los programas no están acreditados, siendo obligatorio.”

En relación a la transición, Joaquín Walker expresó que tres años es un plazo razonable para las carreras que aún no cuentan con la acreditación lo hagan. De todas formas reconoce dos excepciones en el sistema: la carencia de profesores de Física y Química, además la realidad de las universidades de regiones, aclarando que la implementación de esta política podría llevarse a cabo de forma más dilatada en algunas zonas extremas.

Finalmente el coordinador de Ciudadanía y Política de Elige Educar asumió que hay que realizar una evaluación caso a caso, “para que esto no se convierta en una regla general a la excepción”.