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Año XVI, 19 de abril de 2024


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Derrota de la Concertación:

¿Quién tiene la culpa?

Una serie de acusaciones mutuas, que se extendieron incluso hasta la Presidenta Michelle Bachelet, se desataron en la Concertación luego de la derrota electoral del domingo. Todo para determinar quién o quiénes fueron los culpables de esta debacle que puso fin a 20 años en el gobierno del país. 

Loreto Soto

  Martes 19 de enero 2010 22:14 hrs. 
Radio-Uchile

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La extraña presencia de un murciélago en La Moneda este lunes, justo después de conocerse los resultados de la elección, fue interpretada por algunos como una metáfora de lo que sucedió en la Concertación.

Luego de la seguidilla de reflexiones y autocríticas que abundaron al día siguiente de la derrota, la conclusión inevitable parecía ser la misma: la manzana se había podrido desde adentro.

Y es que los desacuerdos que partieron con la forma para elegir al mejor candidato presidencial, que terminó dividiendo a la centro izquierda en tres campañas distintas – la de Marco Enríquez Ominami, Alejandro Navarro y Jorge Arrate – continuaron durante todo el proceso y se acrecentaron en la medida que avanzaba el proceso electoral.

Diferencias que terminaron con la renuncia de algunos presidentes de partidos, con el rechazo a quienes se quedaron y, finalmente, con la derrota en las urnas después de 20 años a la cabeza del gobierno.  

Sin embargo, cuando llegó la hora de enfrentarse, mirarse las caras y asumir responsabilidades, se prendió el ventilador y disparó para todos lados.

Durante la primera jornada, fueron las juventudes las que se encargaron de exigir la renuncia de los presidentes de partidos que quedaban, Juan Carlos Latorre de la DC y Camilo Escalona del PS. El argumento era que el desgaste de los rostros de los “dinosaurios” de la política habría sido lo que gatilló la derrota. Por lo mismo, apelaron al recambio generacional y a la salida de las cúpulas, que no habían entendido, las transformaciones de la sociedad chilena.

“Un acto de justicia es que renuncien Juan Carlos Latorre y Camilo Escalona, quienes son los máximos responsables de esta derrota, de esta debacle de la Concertación. Aquí nace una nueva coalición, una nueva izquierda encabezada por jóvenes, con un nuevo liderazgo, con una nueva visión”, decía el dirigente del PS, Patricio Mery.

Al mismo tiempo, un obstinado Juan Carlos Latorres, desoía los mensajes y aseguraba que fueron las divisiones dentro del Partido Socialista las culpables de esta situación.

"Tenemos que la realidad de cada partido es distinta, nosotros tuvimos que enfrentar todo este proceso con varias candidaturas que tienen su origen en el Partido Socialista, eso genera una situación extraordinariamente difícil de abordar, creo que ese es un factor", dijo.

Y como no toda la carga de la guerra puede caer en un solo soldado, Camilo Escalona, se defendió diciendo que “se está haciendo un esfuerzo por demonizar mi propia responsabilidad personal". Frase que reflejó la poca efectividad que provocó la carta que Latorre le envió este martes para aclarar que sus críticas no eran algo personal.

Escalona agregó además que  “Quiero decirles a todos los que han dicho que yo no quería primarias que eso es un hecho enteramente falso. Al contrario, yo fui el presidente de partido que más empujó la idea de primarias luego que Soledad Alvear renunciara a la presidencia de la  DC, fui yo el que mantuvo en los hechos la continuidad de la Concertación cuando se produjo el cambio de liderazgo en la DC por efecto de la elección municipal".

No contento con estas explicaciones sobre la derrota, el recién asumido presidente del Partido Radical, Fernando Meza, apuntó sus dardos directamente contra la Presidenta, Michelle Bachelet. "¿Cómo es posible que una Presidenta con más del 80% de aprobación, y más de un 60% de valoración positiva al gobierno, no haya sido capaz de capturar esa simpatía para el candidato de la Concertación?".

Meza fue aún más allá e indicó que  "la candidatura de Frei fue gestada como un embarazo no deseado por gran parte de la Concertación (…) La Moneda se volcó a la candidatura de Frei y la Presidenta también se volcó, ¿pero fue suficiente hacer esto a última hora? No conozco un país en el mundo donde el jefe o la jefa de gobierno deje a la deriva la conducción del conglomerado que la llevó al gobierno. Cuando se nos ha atacado, La Moneda guardó silencio, siempre silencio en su 80% de éxito que es capturado para sí mismo”.

Tampoco faltaron los que emprendieron contra Marco Enríquez Ominami por lo que calificaron como un respaldo tardío. En fin, una serie de acusaciones para racionalizar esta derrota que tiene abatidos al todo y, ciertamente, a las partes.  

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