El arzobispo de Concepción, Ricardo Ezzati, comenzó en la tarde de este miércoles su labor como mediador entre el Gobierno y los comuneros mapuche en huelga de hambre hace 66 días en cárceles de Temuco, Lebu, Concepción y Angol.
En una casa del arzobispado en Concepción, el sacerdote se reunió por cerca de tres horas con Víctor Queipul, Erick Millán, Natividad Llanquileo, Gladi Huenuman y Pamela Pesoa, encuentro que fue considerado por las partes como un primer acercamiento.
Se espera que ahora el obispo se comunique con el Gobierno y le haga llegar las demandas de los presos movilizados: la no aplicación de la Ley Antiterrorista y no ser juzgados por la justicia militar y civil simultáneamente.
Aunque ni Ezzati ni los voceros entregaron mayores detalles de la reunión, los comuneros mapuche esperan que el diálogo con las autoridades gubernamentales se realice en Concepción, cercano a los presos en huelga de hambre, y no en La Moneda.
Al mismo tiempo, fuentes oficiosas del Vaticano manejarían la opción de que Ezzati sería nombrado cardenal de Santiago. Su nombramiento se mantendría “in pectore”, a la espera de ser divulgado.