Un fuerte rechazo provocó el ataque en contra del automóvil del rector de la Universidad de Santiago (Usach), Juan Manuel Zolezzi.
A través de una declaración pública, el Consejo de Rectores expresó que “hechos de violencia de esta naturaleza son totalmente ajenos al espíritu universitario, por lo que deben ser categóricamente rechazados con la mayor energía por todos los miembros de las comunidades universitarias”.
La entidad llamó a que estos hechos sean “investigados y sancionados para que no se vuelvan a repetir”.
En la misma línea, el ministro de Educación, Harald Beyer, sostuvo que al Gobierno le parece “muy grave este ataque porque no hay ninguna justificación para ello. Nos parece que esta situación es realmente impresentable, muy grave y la condenamos enérgicamente”.
El rector de la Universidad de Chile, Víctor Pérez Vera, informó en un comunicado que “el rector Zolezzi tiene todo mi apoyo y solidaridad, al igual que su familia. Este ataque es inaceptable y completamente ajeno a la vida universitaria”.
En tanto, la Confederación de Estudiantes de Chile (Confech) visitó al rector Zolezzi, para entregarle su solidaridad.
Por medio de las redes sociales, el atentado fue condenado por el presidente de la FECH, Gabriel Boric, la vicepresidenta de esa organización , Camila Vallejo, el presidente de la FEUC, Noam Titelman, y el vocero de la Federación Mapuche de Estudiantes, José Ankalao, además de los ex dirigentes estudiantiles Giorgio Jackson y Camilo Ballesteros. Todos coincidieron en que estas acciones de violencia irracional no tienen nada que ver con las ideas del movimiento estudiantil chileno.
Por su parte, la Intendenta de Santiago, Cecilia Pérez, emplazó a las comunidades universitarias a erradicar a las personas que “se encapuchan para efectuar este tipo de actos tan violentos”.
Zolezzi ya anunció una querella en contra de los que resulten responsables de este acto, que ya está siendo investigado por Carabineros, quienes comenzaron un operativo para localizar a seis encapuchados que habrían perpetrado el hecho.
La autoridad universitaria calificó el ataque como un intento de amedrentarlo que no se condice con el espíritu de las comunidades universitarias: “No sé si en mi contra o no, pero mi auto terminó quemado. Yo había llegado unos diez minutos antes, subí a la Rectoría y el auto quedó ahí. Después le avisaron al chofer que el auto estaba ardiendo. Está Investigaciones, Carabineros, la denuncia a la Fiscalía, ya está todo”, dijo.
La explosión se produjo cerca de las 11 horas en las dependencias del plantel, luego que detonara una bomba molotov que había sido instalada al interior del vehículo de Zolezzi -de propiedad fiscal- después de que los sujetos quebraran el vidrio del conductor y rociaran el auto con bencina.
La acción fue protagonizada por seis encapuchados que aún no son identificados, según describió German Kerberg, testigo de lo ocurrido: “Estaba estacionado al lado del vehículo del rector y unos jóvenes llegaron corriendo. Venían todos encapuchados, entre seis y ocho personas, cada uno sabía su función y empezaron a quebrar los vidrios del vehículo de al lado. Gritaban algo, pero yo subí mis vidrios, encendí mi vehículo y traté de pedirles que a mí no me hicieran nada. Quebraron los vidrios, tiraron algo como bencina y ahí explotó”, relató.