Los cerdos de la clausurada planta de Freirina no irán a otro criadero, sino que serán sacrificados en plantas procesadoras de carne, según confirmó el gerente general de Agrosuper, José Guzmán, quien dio fin a la polémica que surgió este fin de semana, cuando los habitantes de la Región de O’Higgins se negaron a recibir a los animales, después de denunciar un amplio prontuario de irregularidades de la empresa en la zona.
El empresario respondió también a los cuestionamientos del senador PPD, Guido Girardi, quien afirmó que presentará un recurso de protección preventivo para evitar el traslado de los cerdos a la sexta región. Sin embargo, Guzmán señaló que esta operación tomará nueve meses y no seis como había determinado la autoridad sanitaria, por lo que pedirán una prórroga.
Frente a esto, la vocera del Movimiento Socio-ambiental del Valle del Huasco, Andrea Cisternas, indicó que los ciudadanos están realizando una nueva solicitud.
“Que organicen otro plan sobre el cierre para arreglar las plantas faenadoras que tiene el mismo Agrosuper, para no afectar a la gente que supuestamente va a recibir a estos cerdos, ya que se supo luego que Agrosuper no solo funcionaba mal en esta región, sino que en todas las que ya está instalada. Así que ya abarca varios lugares de Chile que tienen el mismo problema de olores, mal tratamiento de fecas y purines, mal uso del agua. Es algo bien grave que ya no es solo local”, aseguró la dirigenta.
Afirmaciones con las que coincidió el alcalde de Vallenar, Cristián Tapia, para quien la empresa no está siendo sincera en su capacidad real de solucionar el conflicto. Además, el edil se refirió al compromiso de la empresa de no despedir a los trabajadores con la clausura de la planta.
“Creo que no se necesita tanto tiempo, es solamente inyectar un poco más de recursos y poder hacerlo lo más rápido posible. Aquí también hay un tema que es importante, que es la fuente laboral de las personas, por lo menos se estableció que no iban a ser despedidas. Mientras ellos más se demoren con esta solución, más se les va a retrasar su proceso productivo. Deberían hacerlo en los 6 meses, las capacidades las tienen y esperamos que así pueda ser”, declaró Tapia.
Sin embargo, el alcalde afirmó que antes del compromiso de Agrosuper de mantener la estabilidad laboral de sus empleados, la empresa habría despedido, al menos, a 20 trabajadores de Freirina, quienes habrían participado de las movilizaciones ciudadanas. Eso, sin contar los despidos generados al interior de las empresas contratistas.
Una situación que inquieta a las organizaciones de trabajadores, según indicó Hugo Páez, presidente de la CUT en Vallenar.
“Es un tema realmente caótico, porque se comprueba que los trabajadores fueron despedidos por haber participado o haber decidido manifestarse, pero nosotros no podemos hacer nada ante tribunales, porque la ley en Chile favorece a los empresarios. Aquí el empresario despide por ‘necesidades de la empresa’, artículo 161, y ante esa eventualidad no tenemos los documentos que legalmente nos acrediten que los trabajadores fueron despedidos por manifestarse”, indicó Páez.
A esto se suman también diversas denuncias ciudadanas sobre la falta de implementos y las malas condiciones laborales con las que estaría operando esta planta. Por todas estas razones, los habitantes del Valle del Huasco solicitaron a las autoridades que se realice una nueva fiscalización, conformada por un comité del pueblo, que pueda corroborar la situación en terreno.