Luego del reciente cambio de gabinete y los adversos resultados en las elecciones municipales, el Presidente Sebastián Piñera ha desarrollado una serie de encuentros con ministros y parlamentarios oficialistas para planificar la última etapa de su mandato, que concluye en marzo de 2014.
Piñera pidió a sus ministros que salgan a terreno a defender sus avances y luego de reunirse en Cerro Castillo con diputados de su sector, señaló sus prioridades para los próximos meses: “Son básicamente cuatro. Primero, que toda chilena y chileno tengan un trabajo digno, seguro y bien remunerado; que todos los niños de nuestro país tengan acceso a una educación de calidad que les permita desarrollar sus talentos; que todos los enfermos sepan que van a tener una atención de salud con dignidad, con eficacia y con cariño; y que todas las familias puedan vivir con mayor seguridad, tranquilidad y paz”, dijo.
Sin embargo, otros temas que deberá atender el Gobierno son la relación con los precandidatos presidenciales, Laurence Golborne y Andrés Allamand, y con la UDI. Esto, luego que se produjeran una serie de tensiones con el gremialismo, que se ha mostrado reticente con reformas políticas y electorales que forman parte del programa de Gobierno. Así sucedió esta semana, por ejemplo, con la reforma que permite la elección directa de consejeros regionales.
En ese sentido, desde la Fundación Chile 21, el ex parlamentario Carlos Ominami sostuvo que en el marco de la carrera presidencial, “el Gobierno va a tener que mantener una cierta neutralidad en relación con las dos candidaturas presidenciales. Por lo tanto, no tiene margen para imponer una agenda respecto de la cual la UDI no esté de acuerdo”.
“No va a ser un asunto simple, porque esa confrontación va a ser muy áspera. No hay grandes diferencias en los proyectos de sociedad que pudieran encarnar Golborne y Allamand, por lo tanto, las discrepancias se van a centrar en los atributos personales y eso puede hacerla una confrontación muy sangrienta”, añadió.
No obstante, desde Libertad y Desarrollo, centro de estudios ligado al oficialismo, sostuvieron que el vínculo con la UDI no experimentará problemas particulares y señalaron la designación de Andrés Chadwick en Interior como una muestra de eso.
“Qué mejor ejemplo que haber puesto a un ícono de la UDI como ministro del Interior y Seguridad Pública”, señaló José Francisco García, coordinador de Políticas Públicas de la entidad. “El jefe político, quien va a estar encargado, entre otras cosas, de llevar la relación con los partidos, es un ícono del partido, de los llamados coroneles. No veo que haya un problema de agenda programática con la UDI en particular. No lo veo en las reformas políticas ni en otras agendas, donde van a tener a uno de sus íconos como ministro del Interior”, explicó.
Las reuniones del Gobierno para preparar su última etapa finalizarán con un comité político ampliado que se realizará en la mañana de este sábado en Cerro Castillo.
Luego del reciente cambio de gabinete y los adversos resultados en las elecciones municipales, el Presidente Sebastián Piñera ha desarrollado una serie de encuentros con ministros y parlamentarios oficialistas para planificar la última etapa de su mandato, que concluye en marzo de 2014.
Piñera pidió a sus ministros que salgan a terreno a defender sus avances y luego de reunirse en Cerro Castillo con diputados de su sector, señaló sus prioridades para los próximos meses: “Son básicamente cuatro. Primero, que toda chilena y chileno tengan un trabajo digno, seguro y bien remunerado; que todos los niños de nuestro país tengan acceso a una educación de calidad que les permita desarrollar sus talentos; que todos los enfermos sepan que van a tener una atención de salud con dignidad, con eficacia y con cariño; y que todas las familias puedan vivir con mayor seguridad, tranquilidad y paz”, dijo.
Sin embargo, otros temas que deberá atender el Gobierno son la relación con los precandidatos presidenciales, Laurence Golborne y Andrés Allamand, y con la UDI. Esto, luego que se produjeran una serie de tensiones con el gremialismo, que se ha mostrado reticente con reformas políticas y electorales que forman parte del programa de Gobierno. Así sucedió esta semana, por ejemplo, con la reforma que permite la elección directa de consejeros regionales.
En ese sentido, desde la Fundación Chile 21, el ex parlamentario Carlos Ominami sostuvo que en el marco de la carrera presidencial, “el Gobierno va a tener que mantener una cierta neutralidad en relación con las dos candidaturas presidenciales. Por lo tanto, no tiene margen para imponer una agenda respecto de la cual la UDI no esté de acuerdo”.
“No va a ser un asunto simple, porque esa confrontación va a ser muy áspera. No hay grandes diferencias en los proyectos de sociedad que pudieran encarnar Golborne y Allamand, por lo tanto, las discrepancias se van a centrar en los atributos personales y eso puede hacerla una confrontación muy sangrienta”, añadió.
No obstante, desde Libertad y Desarrollo, centro de estudios ligado al oficialismo, sostuvieron que el vínculo con la UDI no experimentará problemas particulares y señalaron la designación de Andrés Chadwick en Interior como una muestra de eso.
“Qué mejor ejemplo que haber puesto a un ícono de la UDI como ministro del Interior y Seguridad Pública”, señaló José Francisco García, coordinador de Políticas Públicas de la entidad. “El jefe político, quien va a estar encargado, entre otras cosas, de llevar la relación con los partidos, es un ícono del partido, de los llamados coroneles. No veo que haya un problema de agenda programática con la UDI en particular. No lo veo en las reformas políticas ni en otras agendas, donde van a tener a uno de sus íconos como ministro del Interior”, explicó.
Las reuniones del Gobierno para preparar su última etapa finalizarán con un comité político ampliado que se realizará en la mañana de este sábado en Cerro Castillo.
Luego del reciente cambio de gabinete y los adversos resultados en las elecciones municipales, el Presidente Sebastián Piñera ha desarrollado una serie de encuentros con ministros y parlamentarios oficialistas para planificar la última etapa de su mandato, que concluye en marzo de 2014.
Piñera pidió a sus ministros que salgan a terreno a defender sus avances y luego de reunirse en Cerro Castillo con diputados de su sector, señaló sus prioridades para los próximos meses: “Son básicamente cuatro. Primero, que toda chilena y chileno tengan un trabajo digno, seguro y bien remunerado; que todos los niños de nuestro país tengan acceso a una educación de calidad que les permita desarrollar sus talentos; que todos los enfermos sepan que van a tener una atención de salud con dignidad, con eficacia y con cariño; y que todas las familias puedan vivir con mayor seguridad, tranquilidad y paz”, dijo.
Sin embargo, otros temas que deberá atender el Gobierno son la relación con los precandidatos presidenciales, Laurence Golborne y Andrés Allamand, y con la UDI. Esto, luego que se produjeran una serie de tensiones con el gremialismo, que se ha mostrado reticente con reformas políticas y electorales que forman parte del programa de Gobierno. Así sucedió esta semana, por ejemplo, con la reforma que permite la elección directa de consejeros regionales.
En ese sentido, desde la Fundación Chile 21, el ex parlamentario Carlos Ominami sostuvo que en el marco de la carrera presidencial, “el Gobierno va a tener que mantener una cierta neutralidad en relación con las dos candidaturas presidenciales. Por lo tanto, no tiene margen para imponer una agenda respecto de la cual la UDI no esté de acuerdo”.
“No va a ser un asunto simple, porque esa confrontación va a ser muy áspera. No hay grandes diferencias en los proyectos de sociedad que pudieran encarnar Golborne y Allamand, por lo tanto, las discrepancias se van a centrar en los atributos personales y eso puede hacerla una confrontación muy sangrienta”, añadió.
No obstante, desde Libertad y Desarrollo, centro de estudios ligado al oficialismo, sostuvieron que el vínculo con la UDI no experimentará problemas particulares y señalaron la designación de Andrés Chadwick en Interior como una muestra de eso.
“Qué mejor ejemplo que haber puesto a un ícono de la UDI como ministro del Interior y Seguridad Pública”, señaló José Francisco García, coordinador de Políticas Públicas de la entidad. “El jefe político, quien va a estar encargado, entre otras cosas, de llevar la relación con los partidos, es un ícono del partido, de los llamados coroneles. No veo que haya un problema de agenda programática con la UDI en particular. No lo veo en las reformas políticas ni en otras agendas, donde van a tener a uno de sus íconos como ministro del Interior”, explicó.
Las reuniones del Gobierno para preparar su última etapa finalizarán con un comité político ampliado que se realizará en la mañana de este sábado en Cerro Castillo.
