Desde 1996, la investigación sumaria se encontraba archivada, hasta que el pasado 21 de enero la Corte Suprema reabrió la causa por el homicidio del ex diplomático español Carmelo Soria, perpetrado por agentes de la DINA el 16 de julio de 1976.
Este nuevo escenario judicial sigue bajo la responsabilidad del magistrado del máximo tribunal, Lamberto Cisternas, quien ahora procederá a efectuar las diligencias pedidas por el representante de la familia de Soria, las cuales fueron desestimadas en años anteriores a juicio de que faltaban detalles, y sólo tenía un carácter genérico.
Según el abogado, Alfonso Insunza, los inculpados por este crimen podrían aumentar más allá de los uniformados que pertenecían a la Brigada Mulchén en el contexto de la dictadura militar (1973-1990).
La hija del diplomático español, Carmen Soria, se mostró confiada en que los culpables terminarán en prisión, ya que considera injusto que, de acuerdo a su información, los culpables salieran bajo fianza y que se encuentren recibiendo beneficios de oficiales en retiro.