“Un meteorito se desintegró encima de los Urales y se quemó parcialmente en las capas bajas de la atmósfera. Fragmentos de meteorito cayeron en tierra, en una zona poco habitada de la región de Cheliabinsk”, informaron las autoridades locales del ministerio de Situaciones de Emergencia.

La onda expansiva quebró los vidrios de los “pisos superiores de los edificios”, agregaron en el comunicado. Testigos dijeron al sitio Internet Rusia Today que sus residencias habían temblado durante el fenómeno y que los celulares estaban fuera de servicio.

Al menos quinientas personas resultaron heridas. Según Interfax, las autoridades locales evocaron numerosas víctimas pero sin suministrar una cifra exacta. Las autoridades locales también informaron que habían recibido numerosas llamadas por traumatismos, heridas y contusiones.

La onda expansiva destruyó las ventanas de la oficina de la agencia de prensa Itar-Tass en el centro de Cheliabinks, informó Interfax. Un muro se desplomó en el centro de la localidad, según un empleado de la agencia.

El ministerio de Situaciones de Emergencia indicó que había desplegado a 20.000 hombres, que fueron puestos en estado de alerta, y tres aeronaves para inspeccionar el territorio. Las autoridades hicieron un llamado a la calma y explicaron que no había llamado a evacuar ya que el nivel de radiactividad era normal.