El Gobierno presentó este lunes los resultados del Sistema de Medición de la Calidad de la Educación, conocido como prueba SIMCE, que contempla alumnos de cuarto básico y segundo medio.

En el colegio San Francisco del Alba en Las Condes, el Presidente Sebastián Piñera junto a autoridades del área, destacó las cifras, con 265 puntos de matemática en segundo medio, un alza de nueve puntos en comparación con el SIMCE 2010. Este es el aumento más significativo en la historia de esta medición.

En Lenguaje, se mantuvo los 259 puntos, situación marcada por la disminución de 3 puntos en colegios particulares, lo que acorta la brecha con establecimientos estatales.

El Presidente Sebastián Piñera subrayó estas cifras, y defendió la gestión de su gobierno en educación. El Mandatario destacó el aumento de financiamiento, aun cuando enfatizó que no es la única herramienta que explica esta alza.

En este sentido, el Jefe de Estado señaló que “en tres años hemos aumentado en casi un 50 por ciento los recursos, que destinamos a nuestro sistema educacional, pero sabemos que esto no es solamente un problema de recursos, que también había que hacer otros cambios, como por ejemplo, aumentar la cobertura en la educación pre escolar y nuestro gobierno se ha comprometido a garantizar educación pre escolar gratuita y de calidad a todos los niños pertenecientes al 60 por ciento de los hogares más vulnerables”.

En cuarto básico, la medición registró 261 puntos en Matemática, dos puntos más que 2011, mientras que Lenguaje mantuvo el índice anterior, con 267 puntos. Historia, con 258 puntos, experimentó un alza en tres unidades, y ocho puntos más que su primera medición.

Estos índices fueron refutados por Mario Sobarzo, investigador del Observatorio de Políticas Educativas de la Universidad de Chile (Opech), quien apuntó que las características del SIMCE no acortan la brecha entre establecimientos estatales y privados.

En esa línea, el especialista en temas educativos indicó que “lo peor de esto es que muestra que más allá de una variación de un año para otro, entre un puntaje y otro, la brecha tiende a mantenerse, eso se debe tener en cuenta cuando se analiza el SIMCE. Hay que tener también en consideración que en la mayoría de los países del mundo que alguna vez aplicaron este sistema de evaluaciones censales en ningún caso se utiliza como un criterio publicitario para sacar una revista que tenga los mejores colegios a partir de la PSU o del SIMCE. En Chile la cuna es la que determina los puntajes de la PSU y el SIMCE. Esto no ha cambiado porque los criterios económicos son determinantes en lo que es la desigualdad educativa en Chile”.

Sobarzo destacó el Simce como un mecanismo de publicidad, ya que define elementos socioculturales que explican una diferencia en los resultados según su capacidad económica, sin que esto se traduzca en fortalecer la educación pública.