Luego que Juan Emilio Cheyre renunciara a la presidencia del Servicio Electoral, las reacciones destacan, en forma transversal, que el ex militar diera un paso al costado para no perjudicar el programa del servicio en un año de elecciones. No obstante, se subraya que hay un proceso de investigación que aún está pendiente respecto de violaciones a los derechos humanos.

Desde el Senado surgen distintas posiciones. Este organismo visó casi por unanimidad el listado de consejeros propuestos por el Ejecutivo para el Servel, donde se incluía al ex jefe castrense. Uno de ellos fue el presidente del PPD, Jaime Quintana, quien ahora optó una posición más crítica y señaló que Cheyre no debería seguir en el servicio, y que en su condición de militar nunca debió integrar esta institución.

El presidente de esta corporación, senador Jorge Pizarro, indicó que no se conocía esta situación al momento de la votación: “Todo lo que se conocía, no se había establecido una situación compleja o sensible como se sabe ahora. Al revés, se conocía su trayectoria como militar y su rol como comandante en Jefe del Ejército, que posibilitó que esta institución se desligara de la dictadura de Pinochet, y ese fue un paso importante para insertar a las Fuerzas Armadas en la sociedad”.

Recordemos que la mayoría de los parlamentarios de la Concertación votaron a favor de su ingreso a este servicio. Ya aprobado el consejo directivo, una votación interna con tres votos a favor y dos en contra le permitió al ex militar ser designado como presidente del consejo.

El senador Alejandro Navarro, quien junto a Ximena Rincón fueron los dos votos de abstención, destacó que el Senado cumplió su rol, pero hoy se debe investigar por el Caso Lejderman, y apuntó que “frente a estos hechos el riesgo es permanente. Cualquiera que pertenezca a las FFAA o a cualquier otra institución va a estar sujeto a controversia, incluso los senadores. Cheyre pasó por un cedazo muy fuerte, y ejerció como comandante en Jefe sin estar este antecedente a la vista. Creo en la integración cuando no hay relación con violación a los derechos humanos, entonces esta situación debe ser investigada”.

El senador Alberto Espina declaró que “cuando surgen antecedentes, debe analizarse caso a caso, pero es inaceptable generalizar” al analizar el papel de los uniformados en el régimen. Por su parte, Lily Pérez destacó que la situación de Cheyre hacía insostenible su posición en el servicio.

La parlamentaria indicó que “el hecho de ser presidente del Consejo Directivo del Servel se hacía insostenible. Es un cargo directo con garantizar las elecciones, muy difícil de tener cuestionamiento político y ejercer con total propiedad, entonces es acertada la decisión de dejar este cargo”.

Consultado este jueves, Juan Emilio Cheyre insistió en su defensa y reitera que no tenía conocimiento de las circunstancias de la muerte de los padres de Ernesto Lejderman.

Cabe señalar que, la tarde de este miércoles, Patricio Santamaría fue nombrado como nuevo presidente del Consejo directivo del Servel. El nombramiento fue oficializado a través de un comunicado, donde el organismo destacó la “labor profesional, dedicación, eficacia y compromiso” demostrados por Cheyre.