La recuperación de la soberanía sobre el cobre y el agua, adopción de una política de desarrollo productivo que revierta la desindustrialización, una política social de derechos garantizados universales y un nuevo contrato social que equilibre la relación entre capital y trabajo, constituyen los 4 ejes principales de la propuesta programática de la candidatura presidencial de Marco Enríquez Ominami, en materia económica.
Democracia económica es el nombre del documento que para estos fines preparó el economista Andrés Solimano.
Entre las propuestas más importantes está fortalecer el rol de Codelco como empresa pública y realizar una reforma tributaria que permita recaudar hasta 5 puntos más del producto interno bruto, a lo que se suma la reducción del gasto militar.
Para el candidato presidencial progresista, se debe terminar con la lógica de los bonos: “Si hay algo que no se hereda son los bonos. Se hereda educación, salud, cultura y derechos, pero a nuestros hijos sólo les dejamos bonos. Este trabajo es no para desvincular la política de la economía, pero sí hacer con ello una mejor democracia”.
Por su parte, Andrés Solimano, indicó que sería una contradicción, pensar cualquier proceso de cambio social sólo desde la mirada política, puesto que se requiere urgente una democracia económica que termine con el modelo neoliberal.
El economista indicó que “una de las grandes contradicciones es la existencia de una estructura democrática con deficiencias políticas, concentrada en la distribución del excedente económico. Planteamos transformaciones de fondo para democratizar la economía, y dar paso a un sistema más justo e integral”.
Otro punto del programa económico de Marco Enríquez Ominami es el cambio del actual sistema previsional por uno mixto que combine la capitalización individual con un sistema de reparto.