La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) se ha convertido casi en una Biblia, que es citada cada vez que se puede para validar muchos puntos de vista.

En ese mismo sentido los especialistas llaman la atención sobre múltiples “salvedades” y “piropos” para Chile planteados por el secretario general de la OCDE, Ángel Gurría, al hablar de desigualdad pero insistir en que el país debe mantener el rumbo político actual.

En esa línea, el secretario general del organismo internacional indicó que es “un reto para Chile como lo es para muchos otros países, pero de ninguna manera estamos planteando que esté aumentando, sino al contrario más bien es una llamada de estímulo para que Chile continúe en la dirección de seguirla reduciendo”.

Por ejemplo, el presidente del Instituto de Ecología Política, Manuel Baquedano, criticó que la OCDE recomiende “optimizar el uso del agua”, como si se pudiera aumentar el rendimiento mediante la construcción de plantas desalinizadoras, embalses, o soluciones “tecnologicistas” como la idea de trasladar agua dulce desde el extremo Sur al Norte a través del mar.

Por esto, el ambientalista señaló que “recomienda cosas que son bien discutibles, yo creo que ahí ha tomado posición, por ejemplo, el tema del agua es crítico y dicen que hay que optimizarlo, pero no hay sólo un problema de optimización, hay una crisis de la forma de cómo se gestiona le agua en Chile. Nosotros estamos con un período importante de sequía, cambio climático que hacen que en realidad el sistema hídrico chileno va a cambiar sustancialmente, por lo tanto, hay que racionalizar y gestionar en forma distinta el agua teniendo mecanismos para que ello pueda ser posible”.

La OCDE dijo también que garantizar educación como “derecho universal” sería una decisión “regresiva” (o sea, beneficiaría a ricos y/o perjudicaría a pobres), aun cuando el promedio de la matrícula escolar pública en los 34 países de la OCDE es de 80% y en Chile de apenas 39%. Al respecto, el académico del Departamento de Economía de la Universidad de Santiago (USACH), el economista Víctor Salas, ha dicho que “esta recomendación nada tiene de económica”.

En esa perspectiva, el docente de la U. de Santiago explicó que “en particular el tema de gratuidad no es un tema ni siquiera económico, es un tema político social, o sea, la sociedad puede decidir sí todo es gratis en la educación y lo decide, de hecho los países europeos en parte han ido modificando esa conducta, pero tienen una gran proporción de gratuidad en todos sus procesos educativos, yo diría que ese es un tema de la discusión política nacional que lamentablemente no se ha dado”.

El organismo internacional recomendó además “limpiar” la matriz energética; o sea, reducir el uso de combustibles fósiles contaminantes como petróleo, carbón y petcoke. El subdirector del Centro de Energía de la Universidad de Chile, Guillermo Jiménez, ha señalado que la política energética del país es la sumatoria de portafolios de proyectos de generadores privados.

Respecto del impactos medio ambiental, el experto del Centro de Energía de nuestra casa de estudios dijo que “desafortunadamente el Gobierno no tiene una injerencia directa en eso y en general manejan un portafolio en que ellos tienen diferentes tecnologías y en función de ese portafolio definen su estrategia de negocio porque estamos en un Estado que aplica el principio de subsidiaridad y lo único que se limita el Gobierno es fijar reglas”.

Por su parte, la jefa de la carrera de Trabajo Social de la Universidad de Concepción, Cecilia Bustos, considera extraño que la OCDE respalde al sistema de administradoras de fondos de pensiones (AFP), que entrega jubilaciones que promedian sólo 173 mil pesos mensuales, e igualmente que se enfatice tanto en la importancia del crecimiento macroeconómico y la estabilidad de las reglas. En su opinión hay que superar la política social focalizada y avanzar hacia derechos sociales universales.

Por esto, la académica de la U. de Concepción indicó que “yo creo que no hay otra manera de garantizar mayores niveles de igualdad social si efectivamente eso no se traduce en un marco regulatorio que ampare políticas con un enfoque de derecho”.

Importa señalar que la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) es un organismo creado a partir del Plan Marshal, con el cual Estados Unidos reconstruyó y protegió los mercados de Europa después de la II Guerra Mundial, y por eso su interés principal es abonar la apertura comercial de las fronteras por sobre otros principios.